• El último informe de Red Eléctrica, sobre 2017, deja poco margen a la ambigüedad.
  • La aportación de las centrales nucleares, la primera fuente, supone el 21,5% del sistema.
  • Le siguen el carbón (17%), los ciclos combinados (13,9%) y la eólica (18,2%).
  • Es lo que ocurre cuando no llueve: la hidroeléctrica ha caído un 50% y las renovables cubren el 33,3%, el peor dato en un lustro.
Si algo clarifica el último informe del sistema eléctrico español, que elabora anualmente Red Eléctrica (REE), es que la energía nuclear y del carbón siguen siendo necesarias para cubrir la demanda eléctrica, lo que da la razón al ministro Nadal cuando explica lo que explica sobre la necesidad de tener en cuenta todas las fuentes de energía, dentro de las metas medioambientales sin que los precios se disparen. En 2017, según ese informe (provisional hasta que se cierre el año) se ha dado lo más parecido a una tormenta perfecta: no ha llovido (léase, sequía), lo que limita la aportación de generación hidroeléctrica, los molinillos se mueven con un viento que da lo que da, similar al problema de la energía solar si es de noche, pero no por ello el personal necesita menos la luz. En suma,  la demanda no desciende, sino que ha aumentado (concretamente, un 1,3%), mientras la potencia instalada ha descendido (-0,6%), básicamente por Garoña. Claro, todo se explica, como complemento, por la peculiaridad española, que no es Noruega (mucha agua) ni Centroeuropea (cerca del gas ruso). Pues bien, en ese panorama casan las cifras: la energía nuclear ha cubierto el 21,5% de la demanda; seguida de la eólica, con el 18,2%; el carbón (17%); las centrales de ciclo combinado (13,9%) y la hidráulica (7%). Así resume el estado de la cuestión REE: "En la cobertura de la demanda, lo más destacado ha sido la escasa aportación hidráulica (7,0% frente al 14,2% del año anterior), que se ha visto sustituida por una mayor aportación del carbón (un 17% frente al 13,9% de 2016) y de los ciclos combinados (un 13,9% frente al 10,2% de 2016)". Es la consecuencia del peor dato en las renovables en un lustro: su cuota ha caído del 40,8% en 2016 al 33,3%. Comentario adicional: "En cuanto a las tecnologías que más han contribuido a cubrir la demanda, la nuclear se sitúa nuevamente en primer lugar con una aportación del 21,5%, seguida de la eólica con el 18,2%. Asimismo, cabe destacar que cerca del 4% de la demanda se ha cubierto con energía importada de otros países". Rafael Esparza