El periódico El País no sale del agujero, a juzgar por las cuentas de 2022 depositadas en el Registro Mercantil y a las que ha accedido El Economista. Y todo ello, pese a que ha reducido fuertemente las pérdidas y ha recibido una subvención de 401.000 euros, pues los ingresos han bajado.

El buque insignia del grupo PRISA se ha convertido en portavoz del Gobierno Sánchez, pero en 2022 le fue algo peor que a su matriz. Si el resultado neto del grupo PRISA pasó de -106,5 millones de euros a -12,9 millones, una cierta mejora… a costa de aumentar deuda, El País ha reducido sus pérdidas algo menos, en concreto, un 70,9%, pasando de -14,4 millones a -4,2 millones. Pero no sólo eso, sino que el diario que dirige Pepa Bueno desde finales de julio de 2021 ha visto reducirse sus ingresos un 2,3%, a 100,9 millones. Por mucho que El País intente quitar hierro aludiendo a que “la guerra de Ucrania que afectó, sobre todo, al mercado publicitario y a la venta de ejemplares”, lo cierto es que vende un 9,5% menos de ejemplares medios diarios y un 12,2% menos del suplemento dominical (es decir, de El País Semanal), aunque crece en suscriptores digitales.

A estas cifras que están lejos de los aplausos se suma el hecho de que desde hace varios meses la plantilla protesta para exigir una subida salarial (la cual no se produce desde 2011) y mejores condiciones laborales. Una protesta que llevó a una huelga en El País hace un mes, a la que también se sumó la plantilla de Cinco Días, el diario económico de PRISA. 

Y ojo, porque en el grupo mediático no sobra el dinero y sus dueños (entre ellos, Joseph Oughourlian) han perdido bastante. Claro que este año no ha empezado bien, porque en el primer semestre, PRISA ha visto aumentar sus números rojos.