Los datos de paro y de afiliación a la Seguridad Social correspondientes al mes de abril han sido publicados por los ministerios de Seguridad Social y Trabajo. El paro bajó en 73.890 personas (-2,6%), impulsado por el empleo en el sector servicios por las contrataciones de Semana Santa. En concreto, marzo cerró con 2.788.370 desempleados. El número de afiliados aumentó en 238.436 afiliados en marzo (+1,17%), y se sitúa en 20.614.989 personasEsta bajada del paro en abril, es inferior a la experimentada en abril de 2022, cuando el desempleo bajó en 86.260 personas. 

Yolanda Díaz ha subrayado que el camino "está demostrando ser el correcto", porque cada vez hay "más empleo y de mejor calidad", pero obvia mencionar los datos publicados ayer por Eurostat que demostraban que seguimos a la cabeza del paro en la UE, la ministra tampoco ha querido hacer referencia a la desastrosa EPA ni a que seamos también el país con más desempleados de toda la OCDE. Yolanda, ni corta ni perezosa, afirma sin temblarle la voz que está generando más empleo y de mejor calidad, cuando los datos de este mes lo salva la contratación en el sector servicios, gracias a los puestos de trabajo creados por la Semana Santa. Dicho en otras palabras, la ministra asegura que el empleo temporal creado por una festividad concreta es de calidad, ¿comprenden?

Según los datos presentados, el paro bajó en todos los sectores económicos, como hemos mencionado disminuyó especialmente en Sevicios que restó 52.216 desempleados (-2,5%), por las contrataciones en la hostelería de cara a la Semana Santa. Le siguieron el colectivo Sin empleo anterior, donde el desempleo disminuyó en 7.973 personas (-3%); la Industria, con 5.391 parados menos (-2,3%) y la Agricultura, con 4.296 desempleados menos (-3,8%) y la Construcción, que registró un retroceso de 4.014 parados (-1,8%).

Además, bajó en abril entre las mujeres y entre los hombres. En concreto, el desempleo femenino se redujo en 38.756 mujeres (-2,2%), frente a un retroceso del paro masculino de 35.134 varones (-3,07%). Así, al finalizar abril, el total de mujeres desempleadas ascendió a 1.679.567 personas, mientras que el número de hombres en paro totalizó 1.108.803 desempleados.

Por edades, el desempleo entre los jóvenes menores de 25 años bajó en 19.848 personas, un 9,2% menos respecto a marzo: lo que nos hace ser el país con más paro juvenil de la zona euro, hito de Yolanda en estos meses.  

El Paro registrado bajó en marzo en todas las comunidades autónomas, especialmente en Andalucía (-20.551 desempleados), Cataluña (-9.506), Castilla-La Mancha (-6.645 Parados) y Madrid (-6.215 desempleados).

Aparentenmente, y obviando que seguimos dependiendo del sector servicios para que baje el paro, todos los datos pueden parecer muy positivos a priori, pero llegan dos alarmas. Primera, lo hemos dicho muchas veces en Hispandiad, los contratos siguen bajando, en abril se registraron 1.157.316 contratos, un 20,2% menos que en el mismo mes de 2022. De todos ellos, 530.537 fueron contratos indefinidos, cifra un 24% inferior a la de abril de 2022, y que supone que la mayoría de los contratos firmados sigan siendo precarios. En total, el 45,84% de los contratos realizados en abril fueron indefinidos, de los cuales 224.308 han sido a tiempo completo, un 21,2% menos que en igual mes del año pasado; 185.315 eran contratos fijos-discontinuos (-22,4%) y 120.914 eran contratos indefinidos a tiempo parcial (-31%). Dicho en otras palabras, el empleo sigue siendo igual de precario y temporal como antes de que Yolanda llegara a ministra, aunque ella diga lo contrario. 

Segunda alarma, los autónomos. La organización de autónomos ATA ha advertido este jueves de que el aumento mensual en 12.959 afiliados registrado por el Régimen de Autónomos (RETA) en abril es "el tercer peor dato de afiliación en un mes de abril de toda la década". ATA ha subrayado que esta cifra "es prácticamente doce veces inferior al crecimiento interanual que había el pasado año, que era de 39.704 autónomos más".

"Los datos reflejan luces y sombras en el mercado de trabajo con un incremento de la afiliación, pero hay que ser muy prudentes, porque prevemos que va a haber pérdida de autónomos este año", ha afirmado el presidente de ATA, Lorenzo Amor.

"Es lógico que en los meses de mayo y junio vuelva a haber crecimiento de autónomos, pero habrá que ver el comportamiento cómo es. Todos sabemos que desde el mes de julio el número de autónomos empieza a reducirse y habrá que ver en cuánto se reduce y cuánto puede ser la pérdida de autónomos que tengamos este año 2023. Todo apunta que será un nuevo año de pérdida de autónomos", ha insistido Amor, quien ha alertado de que los datos "siguen siendo preocupantes", "con 11 Comunidades Autónomas perdiendo autónomos" "no hay motivos para celebrar un incremento en abril, que es habitual, pero menor que otros años".