Rodrigo Buenaventura aseguró este martes que el informe sobre Grifols se publicará en “unas semanas”, algo que nos llena de satisfacción teniendo en cuenta que el informe y primer ataque bajista del fondo Gotham se produjo el 9 de enero, hace ahora siete semanas.

El presidente de la CNMV se justificó diciendo que tuvieron que solicitar documentos adicionales a la compañía: “Los acabamos de recibir hace pocos días y todavía requerimos unas semanas más”, afirmó este martes, durante la presentación a la prensa del Plan de Actividades de la CNMV para 2024. Sea como fuere, va a pasar demasiado tiempo y los más perjudicados serán, como siempre, los pequeños accionistas a los que se supone, debe proteger la CNMV.

Porque, ¿y si resulta que las cuentas de Grifols no tienen ninguna irregularidad y que, por el contrario, el informe del fondo Gotham no es correcto? Desde el fatídico nueve de enero, las acciones de la compañía se han desplomado un 17,7%. Han pasado de valer 14,24 euros a 11,72 euros por título.

Pero Buenaventura se niega a suspender la cotización de Grifols, al menos hasta que se aclare la situación. Y a la velocidad a la que trabaja, a lo mejor cuando publique sus conclusiones ya no existen ni el fondo ni la compañía.

Menos mal que, según explicó su presidente, la CNMV ampliará la plantilla en 76 empleados para reforzar su actuación en criptoactivos, ciberseguridad e inteligencia artificial, que son los tres ejes sobre los que giran los 42 objetivos del Plan de Actuación 2024 del organismo.