Decíamos ayer martes que lo más importante de los Presupuestos Generales del Estado (PGE de 2023) es que se dispara el gasto social y endeuda a los españoles, con techo de gasto récord, evidentemente: se acercan las elecciones y cada voto cuenta. Pero esto, de lo que se enorgullece la ministra María Jesús Montero, no es justicia social, sino todo lo contrario, porque lo que Pedro Sánchez gasta, alguien tiene ganarlo y pagarlo... y ese alguien somos todos.

En estos Presupuestos expansivos, de entre las concesiones que logró Podemos, supuestamente a última hora aunque Marisu tenía su libro verde de los PGE 2023 impreso y encuadernado, está la Ley de Familias. La titular de Hacienda aseguraba que no podía dar muchas explicaciones porque el proyecto aún está en fase de borrador y no ha sido remitido al Consejo de Ministros.

Tendremos que esperar a una rueda de prensa de la ministra Ione Belarra, que será la encargada de dar más detalles, pero por ahora se ha podido saber que consistirá en un 'cheque crianza', una prestación de 100€ al mes por hijo de los 0 a los 3 años. Marisu insistía en aclarar que esta prestación ya existía pero que "se amplía el colectivo de personas que van a poder recibir esta prestación", puesto que actualmente solo la reciben las madres que trabajan y parece ser que se hará extensible a las mujes en paro. 

Además, se asimilarán las familias monomarentales con dos hijos a la categoría de familias numerosas, se ampliarán las bajas y habrá permisos de conciliación. 

Pero vamos con la 'gran medida' del cheque crianza: está bien que se amplíe a mujeres en paro, pero sigue siendo rácano. Para empezar, la ayuda sólo se recibe durante los tres primeros años de vida del hijo, como si un niño de tres años y un día no necesitara comer o vestirse con ropa de su tamaño o como si durante el embarazo no se tuvieran gastos. Y 100€ da para bastante poco y más con la inflación disparada. 

Incluso planes de natalidad en Comunidades Autónomas son 'más generosos'. Recordemos que la Comunidad de Madrid puso en marcha el pasado enero su estrategia de fomento de la natalidad, así Díaz Ayuso iniciaba en España el salario maternal, aunque se quedaba muy corta, eso sí, menos rácano es este plan que el de Sánchez. 

Como ejemplo, Alemania: más de 200€ mes por niño, desde el embarazo y hasta que el niño se vaya de casa, que puede ser a los 18, a los 25 o a los 30. Y si los progenitores están separados y el padre no puede pagar la pensión, se encarga el Estado y esto solo en ayudas directas, porque hay muchas más. 

Pero ya saben, estamos en vísperas electorales y Sánchez tiene que decirnos que apuesta por las familias y por los más vulnerables, pero destina 100€ al mes por niño y 380€ por cada aborto.