Javier Escribano se destapó este jueves como un alumno aventajado del Sanchismo. El presidente de EME y consejero de Indra, de la que EME posee el 14,3%, aseguró este jueves, atención, que no vendería la empresa, aunque le ofrecieran “miles de millones”. “Es imposible que la vendamos”, afirmó, al tiempo que habló de la fusión con Indra, empresa que preside su hermano Ángel y de la que él es vocal del Consejo, como hemos dicho antes: “Si nos fusionamos con Indra podemos crear una compañía capaz de competir con Leonardo dentro de cinco años”, o “siete o diez”.

¿Comprenden? No la vendería, pero sí la fusionará con Indra. Es como si el dueño de una pequeña tienda de comestibles dice que no la vende, sino que la fusiona con Carrefour. Además, como EME no cotiza en bolsa, los bancos de inversión contratados por ellos la valoran en unos 2.000 millones de euros cuando ni siquiera factura 500. ¿No es genial?

Por cierto, admitió que la operación, que en Hispanidad hemos calificado de abyecta, porque lo es, se podría retrasar hasta el primer trimestre de 2026. Es decir, ni él ni su hermano Ángel han logrado convencer a los Aperribay, dueños de SAPA (7,9% de Indra), que también reclaman su parte del creciente pastel de la industria de Defensa.

Negar que quiera vender EME y al mismo tiempo asegurar que la va a fusionar con Indra, no se sostiene. Por eso, Escribano, Javier, arremetió contra los medios de comunicación -muy pocos, Hispanidad entre ellos- que lo critican. “Hay una literatura errónea que supera el 80%”, afirmó. “Entiendo que es un tema morboso que nos gusta criticar. Que digan lo que quieran”, señaló sin despeinarse.

Resumiendo: los Escribano quieren vender su empresa a Indra, de la que poseen el 14,3% -no es propiamente una fusión porque Indra es mucho mayor- y, para lograr un canje aceptable para ellos han encargado varias valoraciones de su empresa que rondan, las últimas, los 2.000 millones de euros. ¿Conflicto de intereses? ¡Noooooooo, que va!

Pero a ellos les da lo mismo porque tras la operación abyecta, seguirán mandando en Indra y tendrán más acciones de una empresa que seguirá subiendo en bolsa durante los próximos años.

Según Javier, no estaba planeado. “Mi hermano es el presidente (de Indra) porque ha sucedido así. No era una cosa que nosotros buscáramos”, sentenció. ¡Faltaría más!

Para terminar, un apunte cuanto menos llamativo: junto a Javier Escribano estuvo, y participó en el evento, organizado por Poa Comunicación, Félix Sanz Roldán, ex director del CNI (2009-2019) y ex jefe del Estado Mayor de la Defensa (2004-2008). Sanz Roldán se prodiga poco y acudió para acompañar a Escribano y apoyar así la operación abyecta, la venta de EME a Indra. Fue como un aval institucional.