Más muestras de la caradura de Alcoa, al volver a pérdidas. Y es que insiste en quejarse de los altos costes de la energía en España, ahora en especial del gas natural, aunque la actividad de electrólisis de su planta de San Ciprián está parada durante este año y el próximo.

El mayor productor estadounidense de aluminio ha destacado que sus centros en Europa se han visto expuestos a mayores costes de energía en el tercer trimestre. En concreto, un aumento de 58 millones en la electricidad en su planta de Lista (Noruega) y de 21,4 millones en el gas natural en la fábrica de San Ciprián (Lugo, España). En ambas instalaciones ya tomó medidas hace tiempo: redujo en un tercio la producción en la primera y a la mitad en la segunda, según señaló el CEO, Roy Harvey, además de tener paradas las cubas de electrólisis. Eso sí, Alcoa ha olvidado referir que recientemente ha sellado un contrato de compraventa de electricidad a largo plazo (más conocido como PPA) a un precio estable con Endesa, que generará dicha energía a través de nuevos parques eólicos durante 10 años y será efectiva en 2024. En dicho año, se prevé que Alcoa reactive sus cubas de electrólisis tras el parón de dos años por los altos precios de la energía, así lo prometió, esperemos que no sea una promesa al ‘estilo Pedro Sánchez’. 

Aunque se queje mucho de la cara energía, ha sido principalmente la liquidación de pensiones lo que más le ha perjudicado en el resultado: pérdidas de 761 millones en el tercer trimestre

El fabricante de aluminio ha referido que los altos costes de la energía y de las materias primas, la caída de los precios del aluminio y la alúmina, y el impacto adverso de la liquidación de pensiones (638 millones) han provocado unas pérdidas de 761 millones de euros en el tercer trimestre. Y aunque se queje mucho de la cara energía, ha sido principalmente la liquidación de pensiones lo que más le ha perjudicado en el resultado. Además, las ventas han bajado un 8,3%, a 2.908 millones, mientras los costes han aumentado un 14,9%, a 273 millones.

En el conjunto de los nueve primeros meses, Alcoa ha visto desplomarse su beneficio neto un 67%, a 277 millones, mientras las ventas han ascendido a 9.984 millones (+11%). “A pesar de un trimestre desafiante, que vio precios significativamente más bajos y altos costes de la energía y materias primas, mantuvimos un balance general sólido, que incluye la transferencia de obligaciones de pensión y la devolución de efectivo a nuestros accionistas”, ha destacado Harvey.