El expresidente de Nissan, Carlos Ghosn, se reunió con el presidente de Líbano después de su fuga de Japón, donde una compañía privada de seguridad lo sacó de contrabando, dijeron el miércoles dos fuentes cercanas a Ghosn, según recoge Swissinfo.

En su reunión en la presidencia, Ghosn agradeció a Aoun por el apoyo que le había brindado a él y a su esposa Carole mientras estaba detenido, dijeron las fuentes. Ahora necesita la protección y seguridad de su gobierno después de huir de Japón, agregaron.

Los funcionarios libaneses han dicho que no habría necesidad de tomar medidas contra Ghosn porque ingresó legalmente al país con un pasaporte francés, aunque los pasaportes francés, libanés y brasileño de Ghosn están en manos de abogados en Japón.

Líbano no tiene ningún acuerdo de extradición con Japón, donde Ghosn enfrenta un juicio por cargos de mala conducta financiera, acusaciones que él niega

Según los términos de su fianza, había sido confinado en su casa en Tokio y debía tener cámaras instaladas en la entrada. Se le impidió comunicarse con su esposa, Carole, y se redujo su uso de Internet y otras comunicaciones.

De su lado, Francia ha anunciado que no lo extraditará si pisa el país, afirmó el jueves la secretaria de Estado francesa de Economía, Agnès Pannier-Runacher, informa Swissinfo.

"Si el señor Ghosn viene a Francia, no extraditaremos al señor Ghosn, porque Francia nunca extradita a sus nacionales", dijo Pannier-Runacher al canal BFMTV.

El gobierno francés considera que Ghosn, que posee triple nacionalidad libanesa, francesa y brasileña, "no debería haberse escapado del sistema de justicia japonés". "Nadie está por encima de la ley", dijo la ministra.

Ghosn también fue el director general del fabricante de automóviles Renault antes de ser expulsado tras su arresto en Japón el pasado noviembre, donde está acusado de malversación financiera. También está siendo investigado en Francia pero todavía no le han acusado de ningún delito.