El Instituto de la Mujer, dependiente del Ministerio de Igualdad de Irene Montero, ha recomendado la lectura del libro ‘Ecofeminismo para otro mundo posible’. Su autora, Alicia Puleo, declaró en una entrevista que la «masculinidad incide negativamente en el medioambiente».

En su perfil de Twitter, el Instituto de la Mujer ha lanzado varias recomendaciones durante el confinamiento provocado por la pandemia del coronavirus. En este caso, el ente público publicitó una obra en la que se habla de la relación que debe guardarse entre el feminismo y el ecologismo.

Su autora, Alicia Puleo, es una de las escritoras más conocidas en este campo. La filósofa y profesora de universidad argentina ha concedido múltiples entrevistas hablando del tema.

En una de ellas, publicada en eldiario.es el pasado mes de septiembre, argumentaba que la masculinidad era un problema para el ecologismo puesto que ciertas actitudes del hombre implican un perjuicio para la naturaleza.

Según comentó Puleo, hay muchos estudios estadísticos que demuestran que las mujeres tienen menos huella ecológica que los varones (será porque los hombres tienen el pie más grande). Esto se debe a que las mujeres tienden más a desplazarse en transporte público y realizan actividades menos perjudiciales para el medio ambiente.

Además, afirma que existe una relación entre género y medio ambiente: «Hay cosas que el varón tiende a hacer porque tiene una consigna que no tienen las mujeres. Así, tiene que comprarse el coche más lujoso, que contamina más, porque tiene que ser importante». En este aspecto incluye también la mayor tendencia del hombre a la caza.

Por ello, la autora sostiene que la masculinidad del hombre provoca que el varón sea un ser más contaminante que la mujer y su actitud perjudica, por lo tanto, en mayor medida a la naturaleza. Y, encima, el hombre suele tener mayor tamaño que la mujer, ergo consume una mayor cantidad de O2. Pura lógica.

La feminista participó también en un festival ecofeminista financiado por la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, titulado «El ecofeminismo es la respuesta».