Se abre una nueva etapa en PRISA porque Juan Luis Cebrián ya no tiene poderes ejecutivos. Moncloa ha abandonado a Janli, pues ya no le podía sostener más y ya no era tan importante en el tema de Cataluña, y Ana Botín, que es quien manda en el grupo mediático, le ha despedido. Algo que se produjo unas horas después de la Junta, en la que nada se intuyó.

Cebrián ya no es el presidente de El País, sino que ha pasado a ser presidente honorario del diario. En apenas cuatro meses, ha perdido su poder: la presidencia de PRISA (ahora en manos de Manuel Polanco), el consejo editorial (su director actual es Augusto Delkader), la presidencia de El País y no se creará la fundación que aspiraba a dirigir para velar por los valores fundacionales…

Sin embargo, en este tiempo, Javier Monzón, el hombre del Santander y amigo personal de Ana Botín, sigue subiendo peldaños. También ha ganado poder el Ceo, Manuel Mirat, que tendrá la máxima responsabilidad en El País y en algunas filiales como PRISA Radio y Santillana (tras la renuncia de Ignacio Santillana).

Nueva etapa que se abre al mismo tiempo que se conocen los resultados del primer trimestre. El grupo ha ganado 9,9 millones de euros, un 54,8% menos que hace un año por el impacto negativo de tipos de cambio y una nueva norma contable (NIIF15). Pero la publicidad sigue siendo un problema, como en las cuentas de 2017: ha caído un 5%, aunque la digital ha crecido un 2% y ya supone el 51% de los ingresos publicitarios. Eso sí, lo más positivo es que ha reducido la deuda de los 1.422 millones de diciembre a 818 millones, con ampliación de capital mediante…

Los ingresos de explotación se han situado en 282,3 millones (-3,8%). En Santillana, la cifra ha sido de 173,7 millones (-19,4%); 58,8 millones de Radio (-3,5%) y Prensa con 45,7 millones (-9,4%).