Las 'colas del hambre' resurgen con fuerza: se están dejando de pagar los ERTEs, las empresas fracasan y mandan al paro a sus empleados. Por otra parte, la subida de los precios de la energía, los alquileres y la cesta de alimentos de la compra, hace que sea imposible mantener una familia. Miles de familias verbalizan así su situación ante el “call center 24h” de la fundación madrina.

Por otra parte, -tal como denuncia Fundación Madrina- la administración vuelve a “no ayudar” o bien a entorpecer la distribución de alimentos que la sociedad civil organizada entrega a familias vulnerables, a través de los bancos de alimentos locales. El Ministerio de Agricultura, a través de los Fondos europeos FEGA, ha reducido la asignación de alimentos para las familias vulnerables, eliminando una entrega, por lo que las ONGs que distribuyen como Fundación Madrina, de 3 entregas anuales han pasado a repartir tan solo 2, es decir un 34% menos en el año anterior 2021, sobre todo es relevante matizar cuando, desde Fundación Madrina se verifica que ha subido hasta un 100% las familias vulnerables condenadas a las “colas del hambre”. 

Todo lo anteriormente expuesto, tanto la suma de la reducción de entrega de alimentos a familias vulnerables por orden ministerial, así como el aumento de la necesidad alimenticia de estas familias, motivado principalmente por el encarecimiento de la “cesta de la compra”, la energía y el precio de los alquileres, logra que aumente el número de familias vulnerables que asisten a las “colas el hambre” de Fundación madrina.

Igualmente, el hecho del agravamiento de la crisis económica Ha generado dos hechos relevantes, por una parte, el aumento al doble de las llamadas al “call center 24h” de la Fundación con lo que genera el mismo efecto en las “colas del hambre” de la Fundación Madrina, y por otra parte, el “desabastecimiento” de alimentos básicos para estas familias. La alimentación que se da es escasa y muchos días se carece de los alimentos básicos esenciales.

Asimismo, las inspecciones que realiza Cruz Roja de las entidades sociales que distribuyen los alimentos, es cada vez más dura, exigiendo tanto decenas de datos personales de las familias y los niños cada vez que van a solicitar los alimentos con demoras que puede llevar varias horas, su firma, como las derivaciones correspondientes de los servicios sociales, y todo ello en papel, es decir, no se puede “tele matizar”. Ello conlleva filas interminables de familias a la espera de recibir alimentos de hasta 3 horas, con esperas junto a sus niños bajo la lluvia, la nieve o el frío. Todo ello, hace que muchas familias vulnerables se queden sin alimentos, obligando a las entidades sociales a tener hasta 8 voluntarios o administrativos diariamente para su “banco del bebe”, como es el caso de Fundación Madrina, para poder cumplir con estas normas de información exageradas que impone el Ministerio, que por otra parte son exclusivamente para fines estadísticos.

Debido a todo lo anterior, Fundación Madrina solicita al gobierno los siguiente:

  • Que aumente al doble, a 4, las entregas de alimentos anuales procedentes del FEGA, debido al deterioro de la situación económica y social.
  • Que el Ministerio elimine las trabas administrativas y burocráticas, que carecen de valor ni sentido, de los documentos que las familias vulnerables deben rellenar cada vez que van a retirar sus alimentos, esta documentación puede retrasar hasta 6 horas la retirada de alimentos; solicitando que se “telematice” la información demanda para evitar tener que rellenar unos papeles absurdos cada vez.
  • Que los servicios sociales faciliten las derivaciones pertinentes a las ONGs privadas implicadas en el reparto de alimentos. Cabe señalar que si una familia no presenta derivación de servicios sociales, no se le puede entregar alimentos, trámites, tediosos, largos, con citas que duran meses o imposibles, o trabajadoras sociales que dicen que no entregan derivaciones desde instituciones públicas a privadas, incluso las hay con reparos ideológicos.
  • Que facilite el trabajo de las ONG´s y de la Sociedad Civil en el reparto de alimentos para poder ayudar, igualmente, a los refugiados de la guerra de Ucrania y que es muy difícil su conexión con los servicios sociales.