En Hispanidad les contamos la denuncia de la Asociación Profesional Guardia Civil (JUCIL): 157 motocicletas eléctricas se incorporaban a la flota del Servicio de Protección a la Naturaleza (SEPRONA)
En Hispanidad les contamos la denuncia de la Asociación Profesional Guardia Civil (JUCIL): 157 motocicletas eléctricas se incorporaban a la flota del Servicio de Protección a la Naturaleza (SEPRONA), unas motos que según un informe tienen una autonomía de 146 km en ciudad y 63 en carretera. Además, sus tiempos de recarga podían ser de hasta 9,7 horas, lo que las convertían en un lastre para la labor del Seprona, pero no sufran, sus emergencias no serán atendidas, pero el planeta estará siendo salvado, que es lo importante.
Pues bien, ya no es solo que las motos sean ineficientes, es que el mismo sindicato ha pedido la inmovilización de las motos eléctricas: "Tras su puesta en marcha, hemos detectado graves defectos y deficiencias que pueden ser un peligro para los agentes. Para lo cual hemos emitido un informe realizado por un Guardia Civil experto del Seprona".
#JUCIL solicita la inmovilización de las motos eléctricas del Seprona.
— Jucil Nacional (@jucilnacional) April 17, 2023
Tras su puesta en marcha, hemos detectado graves defectos y deficiencias que pueden ser un peligro para los agentes.
Para lo cual hemos emitido un informe realizado por un Guardia Civil experto del Seprona. pic.twitter.com/j8CwqHn9VK
Lo cuenta el digital policial H50, según el informe que será presentado ante el Consejo de la Guardia Civil, las motos tienen una serie de características que las hacen peligrosas para el uso en el campo. Para empezar, los agentes del Seprona no han recibido formación para el uso de este tipo de vehículos, los cuales carecen de neumáticos específicos para usar en el campo: “Los neumáticos que portan de serie, son de un perfil más indicado para asfalto o pistas, siendo muy peligroso su manejo fuera de esa superficie”.
Además, tienen unas defensas laterales que complican su uso en montes o lugares de difícil acceso: “Imposibilitan la conducción todo terreno, por entorpecer sacar la pierna buscando posibles apoyos, llegando a provocar golpes en las piernas del motorista”, “sobresalen por los laterales de la moto, de forma que puede ocasionar que en la conducción por zonas forestales golpee con rocas, troncos, ramas o cualquier otro elemento del medio natural, pudiendo ocasionar un accidente o impida el paso del vehículo”.
JUCIL añade que las motos hacen uso de una transición por correa, lo que creen que es "lo más grave", ya que dificulta la conducción fuera del asfalto puesto “que cualquier elemento entre en la corona y desmonte la correa de su sitio, o que se rompa, provocaría una avería y, en el peor de los casos, un accidente del motorista.
Un informe desaconseja las nuevas motos eléctricas para el SEPRONA de la Guardia Civil.#JUCIL solicita su inmovilización por ser un riesgo para los agentes obligados a utilizarlas.https://t.co/stoacX5wtr vía @h50digital
— Jucil Nacional (@jucilnacional) April 17, 2023