Vamos con otro ejemplo más de la España segura de Marlaska. Esta vez en el barrio de Campclar, en Tarragona, donde la cartera ya no reparte, desde que la intentaron violar. Los vecinos tienen que ir hasta la oficina de Correos, para recoger su correspondencia.

Y, mientras esto sucede, Salvador Illa, presume en el parlamento catalán de la efectividad del Plan de Barrios de la Generalitat.