Según la resolución judicial, el joven deberá someterse durante dos años a un programa de educación sexual y de igualdad, además de cumplir con un periodo de libertad vigilada. Si completa con éxito las condiciones impuestas y no reincide, la medida de internamiento quedará definitivamente anulada. De coña.

El fallo también establece el pago de una indemnización a la víctima en concepto de daños morales, por un total de 6.000 euros, que podrá abonarse de forma fraccionada.

La decisión se ampara en la Ley Orgánica 10/2022, conocida como la Ley de Garantía Integral de la Libertad Sexual, -otro 'éxito' del Sólo sí es sí, de Irene Montero- y en la normativa de responsabilidad penal del menor, que prioriza la reinserción y la reeducación frente al castigo, que es de derechas