Desde el más reciente, el abucheo a Sánchez a su llegada a la capilla ardiente de Carlos Saura, al grito de: ¡Que te vote Txapote! a una sucesión de críticas al presidente que reflejan una misma idea: el Sanchismo pierde la calle.

Hagamos un recorrido por el mapa de abucheos a Pedro Sánchez:

Empecemos por el también famoso vecino de Zamora que se dirigía así a Sánchez, cuando este acudió a la zona afectada por un incendio: “¿Arreglarlo? ¡Qué vas arreglar tú!”:

Toledo, donde Sánchez había acudido para celebrar el segundo mitin de 'El Gobierno de la Gente', la campaña lanzada por el PSOE para «explicar directamente a los ciudadanos las medidas y políticas adoptadas por el Ejecutivo en su beneficio», en palabras de la portavoz de la Ejecutiva socialista. 

Otra muestra, en Sevilla.

O en Murcia, durante su visita para la inauguración del AVE que une Madrid con la capital que atraviesa el río Segura, en la que fue muy maleducado con el Rey. Los manifestantes reunidos frente a la estación de tren de la ciudad 'saludaban' así al presidente.

Pedro Sánchez quiso asistir a Villanueva de la Serena y Don Benito para felicitar a ambos municipios por su unión en una sola ciudad. Allí, el presidente expresó el "enorme orgullo" que el Gobierno de España siente por estos ciudadanos y ciudadanas, y también por los grupos municipales de las dos localidades, que "han antepuesto el interés general a cualquier legítimo interés partidista". Al juzgar por el recibimiento a Sánchez, el orgullo no era mutuo.

Y con este panorama, el presidente se ha visto obligado a buscarse amigos para sus performances: juego de petanca con jubilados socialistas, paseo en bici por Valladolid o café en Parla, con Óscar y Mari Carmen.

No esta sólo Sánchez a la hora de sufrir el rechazo de la calle. Le acompaña, por ejemplo, Carolina Darias con quien, al parecer los ciudadanos no comparten su "éxito de país".

Decíamos en Hispanidad que con el rechazo del pueblo empezó el declive de Felipe González, a quien estudiantes de la Autónoma abuchearon en su día. ¿Seguirá Pedro Sánchez el mismo camino? Lo iremos viendo...