Núñez Feijóo (Antena 3): "El Gobierno es capaz de cualquier cosa, pero España no resiste cualquier política"

En Antena 3, el presidente de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, ha dicho: "La evolución epidemiológica de Galicia es estable. Galicia está en una situación que permite la movilidad interior". "Tenemos una red sanitaria preparada, empezamos a comprar material el 1 de marzo. Las decisiones que hemos tomados nos han llevado a vencer el pico del virus".

“El Gobierno es capaz de cualquier cosa, pero España no resiste cualquier política”. “No es necesario el estado de alarma cuando tenemos una ley de sanidad pública”. “No tener una vacuna debería motivarnos para modificar la Ley de Salud Pública”. “La movilidad interior es buena para la recuperación social y económica”.

“Hemos tenido que poner las elecciones el 12 de julio porque ya estaban convocadas. Vamos a innovar buscando fórmulas en correos para quien no quiera ir a votar”. "Ir a votar a un colegio electoral no tiene más riesgo que ir a un supermercado o una farmacia".

En Onda Cero, la ministra de de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, ha  invitado a los turistas extranjeros a reservar ya sus vacaciones en España para julio. Es "perfectamente coherente" que los turistas extranjeros puedan planificar sus vacaciones en España en julio porque la cuarentena de dos semanas para los turistas se eliminará cuando acabe el estado de alarma.

“El estado de alarma no es un capricho del Gobierno, es el instrumento que tenemos para salvar vidas”. "Estoy convencida de que en muy poco tiempo vamos a recuperar la movilidad que tanto necesitamos los españoles para poder irnos de vacaciones".

En Onda Cero, Carlos Alsina comentaba: “Sostiene Sánchez que la guerra se acaba. Sostiene Sánchez que es hora de ir pensando en vacaciones. Sostiene Sánchez que de esta crisis descomunal, según la calificó él mismo, salimos fortalecidos. ‘Salimos más fuertes’, dice Sánchez. Salimos más fuertes, ¿en qué, presidente?

Veintiocho mil fallecidos después, doscientos cuarenta mil enfermos, seiscientos mil parados, tres millones y medio de personas con su empleo suspendido, miles de ellos que aún están esperando a cobrar su salario, médicos y enfermeros exhaustos, centros de atención primaria con más trabajo que nunca y los mismos recursos de siempre, el clima político agriado, el gobierno proyectando desconcierto, la inquietante debilidad parlamentaria que le lleva a ver en Bildu un socio apreciable. Fuerza progresista, los llamó Sánchez el miércoles.

¿Es más fuerte hoy nuestro sistema nacional de salud, del que tanto han presumido siempre los gobernantes de todo signo? Éramos la mejor sanidad del mundo, pero llegó el coronavirus y la nuestra fue la historia de un parche tras otro parche y tras otro parche.

¿Es más fuerte nuestro sistema de alertas sanitarias? Ni siquiera se ha examinado todavía si este departamento del ministerio de Sanidad que ahora se ha revelado tan necesario cumplió con su tarea de alertar.

¿Funcionó bien o se quedaron cortas las advertencias que hizo? Es una pregunta imprescindible que al gobierno parece que le molesta”.

En Onda Cero, Fernando Ónega decía: “Puestos a buscar posibles causas de las repentinas prisas del gobierno, yo añadiría una tercera: el turismo.

Estamos en un momento crucial en que millones de personas en Europa y en España planifican sus vacaciones. Otros países han abierto ya sus puertas. Quedarse atrás en esa carrera significa perder visitantes e ingresos y agravar la crisis, ya descomunal, del sector. Decir "España te espera" y fomentar el turismo interior parece una de las tareas más urgentes que se puedan acometer.

La otra hipótesis, la de dificultades para negociar una nueva prórroga quizá sea real, pero lamentable. No la descarto después de todo lo visto en el acuerdo con Bildu y la actitud de los partidos que se oponen, pero digo: que haya que adelantar el final de la alarma porque hay dificultades para sacar adelante el último decreto sería una confesión de debilidad del Gobierno, de ineptitud para acordar algo elemental y de incapacidad de la oposición para un último ejercicio de generosidad. Y dicho eso, espero y deseo que la razón fundamental sea la sanitaria. Es decir, que el virus esté conjurado y que el peligro de contagio sea mínimo, aunque se puedan producir brotes puntuales.

Si se abre España al turismo o se fomenta la movilidad interna y eso sirve para que vuelvan los contagios, no solo no se habrá resuelto el problema, sino que se habrá agravado ante el futuro. España habrá perdido confianza como país. Dicho en román paladino, habremos hecho un pan como unas tortas”.

En Onda Cero, Rubén Amón lanzaba sus preguntas: “Atascos, polución, dióxido de carbono, bocinazos. ¿Era una manifestación contra Pedro Sánchez o contra Greta Thunberg?

¿Y no conviene precisamente a Sánchez que sea Vox quien lidere las protestas motorizadas con el argumento del bocinazo y la banderita?

Sánchez abre las puertas al turismo. Así en general, sin fecha ni requisitos, pero ¿no le quedó un poco populista anunciar en primer lugar que regresaba el fútbol?

Leía una crónica de Anabel Díez en El País de acuerdo con la cual Sánchez ya habría empezado las negociaciones de la sexta prórroga. ¿A quién le queda por engañar, a los ujieres, a las taquígrafas, al proyeccionista?

Urkullu manifestaba ayer a Sánchez su malestar por el acuerdo con Bildu. ¿Teme el lehendakari que el PSOE e Iglesias estén urdiendo un tripartito con Otegi para las elecciones vascas? Ya sé que suena muy fuerte, pero mucho cuidado con la trama de las izquierdas.

Estrenamos en Madrid y en Barcelona la fase 1. ¿Cuántos madrileños y barceloneses van a acampar en las terrazas de los bares? El BOE no menciona nada del reencuentro de la España que madruga.

Y dice Sánchez que varias autonomías saldrán del estado de alarma en los próximos días. ¿No podía ser un poquito más preciso respecto a cuáles y qué plazos? La transparencia para este Gobierno es un fotomontaje”.

En la COPE, Antonio Naranjo opinaba: “Esto es gravísimo porque lo hacen las propias autoridades sanitarias, cuyo portavoz luego comparecía en público para sostener lo contrario de lo que él mismo había firmado internamente. Pero es que se acumula a un listado de informes que dan para hacer ya los episodios nacionales de Galdós. Es que hay advertencias desde enero de la UE, de la OMS, del propio Ministerio de Sanidad, d la OMC y también del sentido común y de lo que veíamos con nuestros propios ojos en l televisión, que pasaba en Italia y en China. Entonces, todo esto agrava la sensación de que el estado de alarma que fue una medida reactiva y no preventiva se hizo sobre todo para tapar esa negligencia y para intentar normalizar la situación de España comparándola con la del resto del mundo como si esto hubiese sido un terremoto, algo imprevisto. Las evidencias de que se pudo prever y por tanto mitigar un fenómeno global con causas locales derivadas de la gestión de cada Gobierno es absolutamente evidente”. “Esos 15 días que se perdieren como mínimo en marzo son los que explican que España tenga una tasa de mortalidad tan alta derivada de un contagio masivo que se pudo contener”.

Pilar García de la Granja destacaba: “Yo creo que Simón solo tiene una cosa que hacer en tiempos normales, que es enterarse de lo que dicen en las reuniones de la OMS. Y como queda claro, por supuesto que se enteró y lo sabía. De hecho, se suspendieron algunos eventos antes del 8-M, se suspendieron algunas reuniones médicas antes del 8-M. Esto es simplemente la constatación de que ellos querían esperar a la famosa manifestación del 8-M y es tremendo”. “El 28 de febrero se suspendió el Mobile”. “Es todo mentira. Era mentira los de los ERTEs y se ha demostrado que era mentira. Es mentira lo del estado de alarma, por supuesto que hay leyes en este país para mantener confinada a la población si tienes un brote. Y la mentira es de cobardes”. “Lo que no es posible es mentir a todo el mundo todo el rato y que no pase nada”.

En la COPE, Tonia Etxarri afirmaba: “El Gobierno lo peor que ha hecho de todo este recurso hasta el final para conseguir los apoyos de Bildu -que no necesitaba-  ha sido blanquear a los herederos políticos de ETA. A mí esto me parece gravísimo. Ha pactado con los que han renunciado al legado de la banda, han provocado una extorsión emocional estas votaciones a millones de ciudadanos. Él echa la culpa de su pacto con Bildu al PP porque le funciona en su parroquia”. “Pero no cuela, se ha visto que su frivolidad y su falta de principios es tan grande que ha llegado a dar normalidad a un grupo político que todavía está por normalizarse. Es un partido legal, pero mientras no consiga despegarse de la historia de ETA y rechazarla no va a ser un partido democrático. Y ya que no tiene Sánchez respeto por las víctimas en general, al menos que las tenga por las víctimas de su propio partido”.

En la COPE, el economista José María Gay de Liébana apuntaba: “Que hoy, para muchos, puede ser un gran día como canta Joan Manel Serrat, seguro, porque este lunes estamos todos, ¡por fin!, faseados-uno o faseados-dos, dependiendo de la unidad territorial en la que nos encontremos. Muchas empresas, con ilusión, pero con tiento, intentarán recobrar su actividad, aunque sea a bajas revoluciones. ¡Hay que proponer recetas para nuestras empresas, qué necesitan entusiasmo a raudales! Ahí está Isidoro, el pescadero –acá en Cataluña, el pescatero-. En estos días de confinamiento, Isidoro, con su modesta aportación, marca para mí una revolución comercial en base a la transformación digital. Cada día, Isidoro envía a sus clientes un video por WhatsApp en el que muestra, explica y ofrece su oferta de pescado, para que vean el pescado y marisco que tiene y hagan la compra por WhatsApp o telefónicamente que pueden recoger en la misma pescadería o Isidoro envía a casa. Me ha impactado positivamente esa creatividad de Isidoro, el pescadero, y sus recursos digitales.

El retorno a la normalidad exige a nuestras pymes, innovar y que fluyan las ideas, redefiniendo el modelo de empresa. El teletrabajo marca nuevos derroteros. Los espacios en las oficinas se reconvertirán. La transformación empresarial, con cambios de estructura, procesos, funciones y personas se acelerará. La inversión en innovación y tecnología y el desarrollo de nuevos productos es la respuesta en este momento. En esta tesitura, hay que desinvertir en lo maduro, en activos poco productivos, en tochos, e invertir en nuevas tecnologías, en innovar, en abrir mercados, en acercarse al consumidor, en captar clientela, en digitalizarse y, sobre todo, disponer de activos basados en el conocimiento y en capacidades empresariales que permitan reinventarse. Como Isidoro, el pescadero”.