En Hispanidad, Ignacio Aguirre ha analizado cómo Estados Unidos se convertía en Gran Hermano cuando Biden decidió que quería saber quién está vacunado y quién no. El presidente utilizaba su veto presidencial para que su plan de vacunación obligatoria para empresas de más de cien empleados siguiera vigente, a pesar de la revocación de los mandatos de vacunación obligatoria por parte del Senado de Estados Unidos, lo que hundía la popularidad de Joe Biden.

Ahora el Tribunal Supremo de Nueva York ha ordenado que se readmita a los despedidos por negarse a la vacunación contra el Covid. Esta noticia cae como una jarro de agua fría sobre la gobernadora demócrata, Kathy Hochul, a unas pocas semanas de las elecciones de mitad de mandato. Pese a la decisión del Supremo, Hochul ha asegura que "lo volvería a hacer". 

El juez aseguró que el requisito de vacunación para un grupo de trabajadores que demandaron a la ciudad es "arbitrario y caprichoso", informa WABC-TV, y dictaminó que a partir de este lunes el Departamento de Saneamiento de la ciudad de Nueva York tenía que dejar de exigir la prueba de vacunación. Además los trabajadores despedidos tendrán que ser reincorporados a sus puestos de manera inmediata. 

"El comisionado de Salud no puede crear una nueva condición de empleo para los empleados de la Ciudad", señala el fallo. "El alcalde no puede eximir a ciertos empleados de estas órdenes... Estar vacunado no evita que un individuo contraiga o transmita el Covid-19". Así, determinó que se violaron los derechos de más de 1.400 empleados, como policías y bomberos, que fueron despedidos.