En Malí han tenido lugar dos ataques terroristas, ejecutados con misiles, contra un barco de pasajeros y contra una base militar a resultas de los cuales han muerto al menos 49 civiles y 15 soldados. 

Los atentados terroristas han sido reivindicados por el Grupo de Apoyo al Islam y los Musulmanes (GSIM), afiliado a los yihadistas de Al Qaeda. 

El barco de pasajeros, de nombre ‘Tombuctú’, fue atacada en el tramo del río Níger que hay entre Tombuctú y Gao, en el norte del país. Mientras que la base militar del ejército maliense se encontraba en la localidad de Bamba, también al norte del país. 

Este ataque ha tenido lugar pocas semanas después de que el Grupo de Apoyo al Islam y los Musulmanes (GSIM) anunciara un asedio contra la región y la ciudad de Tombuctú, una de las localidades más grandes de Malí que en 2012 ya había caído en manos de grupos salafistas.

Malí está gobernado por militares desde un golpe de Estado ejecutado en el verano de 2020.

Pero grupos yihadistas han seguido expandiendo su influencia por el territorio maliense y, también, hacia los vecinos Níger y Burkina Faso, asegura Swissinfo.