Al absurdo del Congreso de los pinganillos del que hablábamos ayer --sus señorías todas castellanohablantes hablando con un pinganillo para entenderse, aparato que encima les traduce al español-- se le podría aplicar perfectamente esta parodia del programa de la ETB Vaya Semanita, sobre el uso de los idiomas en una Torre de Control.

Porque lo mejor para desdramatizar lo que está ocurriendo en España, y particularmente en el Congreso, es tomárselo con humor.

Pasen, vean y escuchen. Es genial (y es muy breve):