En Hispanidad hemos ido narrando la obsesión y la guerra sin cuartel de los partidos de izquierdas contra la tauromaquia. El ministro de Cultura, Ernest Urtasun, un verdadero obseso contra la Fiesta Nacional y todo lo que huela a tradiciones españolas, eliminó el Premio Nacional de Tauromaquia.
Y es que no deja de ser curioso como la tauromaquia está siendo ferozmente atacada por la izquierda, esto es algo que ha ocurrido siempre, pero la batalla se está recrudeciendo. La izquierda usa esta actividad supuestamente por amor al animal, pero detrás se esconde un intento de borrar las tradiciones españolas, el humanizar al animal y un factor más de división. Y también curioso cómo, más o menos taurinos, todos aquellos que defienden la libertad se han convertido en defensores de la tauromaquia, reconvertida en estos días en una batalla para los más transgresores.
Ahora, en nuevo ataque, la formación en su versión de Más Madrid ha presentado una proposición no de ley para exigir al Ejecutivo de Díaz Ayuso varias medidas para acabar con este arte. ¿Cómo quieren llevarlo a cabo? Pues proponen la la supresión del Premio de Cultura a la Tauromaquia de la Comunidad de Madrid, la eliminación de subvenciones y la derogación de la Categoría de Bien de Interés Cultural de la Fiesta de los Toros.
Además, plantea un Plan de reconversión del sector taurino. Para reciclar a los trabajadores del mundo taurino y cambiar el uso de los recintos utilizados durante la fiesta nacional. Para ello pretende "reconvertir las infraestructuras taurinas en espacios culturales y participativos", transformándolos en "espacios multifuncionales". "Estos espacios podrían servir como grandes salas de conciertos, galerías de arte, centros de conferencias o espacios comunitarios que fomenten la participación ciudadana y la cultura local".
Asimismo, Más Madrid quiere ofrecer "programas de formación y capacitación financiados por la Comunidad" para "aprovechar las habilidades existentes de los trabajadores del sector mientras se les proporcionan las herramientas necesarias para adaptarse" a su nuevo empleo.
Para el partido de Moni García, antes médico, después diputada de la Asamblea, ahora ministra y siempre madre, la tauromaquia es un "anacronismo" y asegura que está "en desacuerdo con los valores contemporáneos sobre el bienestar animal". Es más, aseguran que, atención: "una gran mayoría de los españoles muestra desinterés o desaprobación hacia las corridas de toros", curiosa afirmación, no aportan datos, y obvian que esta semana de toros en Sevilla ha dado grandes datos de audiencia a Canal Sur, cosa que no puede decir, por ejemplo, 'La familia de la tele' de José Pablo López.
En cualquier caso, no es la primera vez que el partido de Manuela Bergerot ataca la tauromaquia en la Asamblea, la última no le fue muy bien.
