El ministro de Universidades nos avanza más contenidos de su Ley de Convivencia Universitaria, aprobada por el Consejo de Ministros el martes 7 de septiembre. Será por aquello de que es de convivencia que la norma permitirá copiar al compañero de al lado en un examen pero, eso sí, ojo con hacerse chuletas o usar un pinganillo, eso sí se sancionará. 

Ayuso
Castells coherente 
Copiar

El documento considera como falta muy grave, por ejemplo, las novatadas, el plagio de Trabajos de Fin de Grado, de Máster o Tesis Doctoral, o el acoso y acoso sexual, castigando a los infractores con la expulsión de la universidad de entre dos meses y tres años o la pérdida de derechos de matrícula parcial durante un curso académico.

Tampoco se podrá impedir la celebración de actividades universitarias. Escrache o boicot a un acto universitario será falta grave, pero los casos se tendrán que valorar de manera individual. ¡Ay si Castells se hubiera dado más prisa con su ley! Pablo Iglesias no habría tenido que soportar que un grupo de comunistas de la facultad de Políticas de la Complutense, el trampolín que el exvicepresidente utilizó para hacer carrera en política, le increpara durante una conferencia sobre un tema original: el fascismo.

Esta ley será solo aplicable a los alumnos universitarios de centros públicos. El borrador de la ley, explicaba en mayo que las universidades privadas podrán desarrollar sus normas de convivencia con base en los principios de la ley.