El magnate de la prensa inglesa de principios del siglo XX, Lord Northcliffe, afirmó que: "Sólo es noticia aquello que alguien quiere ocultar, lo demás es publicidad". Los noticiarios de los medios actuales están cargados de publicidad: El covid, la guerra encubierta de Biden en Europa, el supuesto cambio climático, la ideología de género, el aborto, la eutanasia o el comunismo son claros ejemplos. Cabe recordar que este es intrínsecamente perverso y que persigue exactamente los mismos objetivos que el nazismo, además de contar en su triste historia con cientos de millones de víctimas. Entre sus hazañas actuales cabe recordar la persecución religiosa que están sufriendo nuestros hermanos de Nicaragua principalmente; pero también en multitud de otros países como Cuba, Venezuela, China, Corea del Norte y un largo etcétera. La matanza comunista continúa en “tiempos de paz”; la gestión de los asilos con miles de víctimas en tiempos de covid, el tratamiento generalizado de la población con medicamentos experimentales y funestas consecuencias, la ley de eutanasia de Sánchez o la nueva ley del aborto de Montero –con el silencio cómplice de Feijoo– son claros ejemplos. También la liquidación de la propiedad privada, la destrucción de la clase media, el empobrecimiento generalizado de la población mientras que ellos se enriquecen al poco tiempo de dedicarse a la política, la manipulación de la historia para tratar de ocultar sus numerosos crímenes, la intervención de la educación, la promoción de la inmigración ilegal a la que luego legalizan y subvencionan para asegurarse votos que les perpetúen en el poder, la destrucción de la familia que es el pilar de toda sociedad, etc. etc. etc. Para enmascarar el desastre siempre encuentran a quien culpar: el covid, Putin o el supuesto cambio climático son los que están más de moda actualmente. Tras la perversión de menores y la destrucción de la infancia, la legalización de la pedofilia, la sustitución de las proteínas y nutrientes tradicionales por la ingesta de gusanos e insectos y la persecución de la objeción de conciencia son sus próximas metas. La agenda 2030 es la encargada de procurar todos estos perversos objetivos.
Las dieciséis mártires carmelitas de Compiègne, guillotinadas en la Revolución Francesa
15/12/24 07:00