Sr. Director:

Podemos, un partido que acaba de llegar.

Un partido guapo, diferente. Un partido que grita con los indignados. Un partido que nos emociona cuando dice que los que más ganan deben pagar más o cuando da esperanzas a los más desfavorecidos o cuando denuncia la suciedad y habla con desprecio de los corruptos o Cuando nos habla de transparencia y de honestidad.

Este partido se ha situado en el centro del debate. Algunos le tienen miedo. Muchos tertulianos dicen que se ha instalado en la crítica, que no ha concretado su programa y que en su curriculum se observan algunas irregularidades.

A mí, de todo lo que se ha dicho me quedan dos imágenes: La de Monedero y la de Montoro. Especialmente la de Monedero, con la mano alzada, diciéndole al ministro que no le tiene miedo: "Montoro no me das miedo, tengo mis cuentas en regla".

Hay que decir que este político había hecho una primera declaración sin incluir el dinero cobrado de ciertos gobiernos de América Latina. Aunque "el error" fue reparado, no se puede negar que es una irregularidad.

Martín Martínez