Sr. Director:
El ex gobernador de Yakarta, un cristiano de origen chino conocido como Ahok, ha sido condenado a dos años de cárcel por un supuesto delito de blasfemia.
La historia que corre detrás de esta infamia no es otra que la pretensión de grupos fundamentalistas musulmanes que se oponen a que un no musulmán ejerza cargos públicos. La jugada les ha salido redonda.
El ex Gobernador, que durante su mandato recibió el apoyo de muchos electores musulmanes, se ha visto ahora condenado por defender el derecho ciudadano a elegir a los cargos públicos independientemente del credo religioso que estos profesen. Este supuesto le consideran delito de blasfemia.
Domingo Martínez
Las empresas familiares se rompen. Del Pino fue el pionero, los Botín y los Entrecanales, los próximos
13/12/24 16:58