A pesar de la pedantería de hablar de América Latina (como si en Hispanoamérica hablaran latín) en lugar de Hispanoamérica o de Iberoamérica, la Hispanidad ha constituido la gran obra de España en el mundo y, con todos los defectos de las obras humanas, los defectos de los hombres, un orgullo para los descendientes de aquellos hombres que en 50 años se lanzaron a la evangelización de un continente decenas de veces mayor que España. Por eso, ahora, Venezuela, a pesar de todos los insultos del majadero Maduro y del Régimen bolivariano, sigue volviendo los ojos hacia España. Por eso, la mujer de Leopoldo López, una valiente, de nombre Lilian Tintori (en la imagen), ha acudido a España y ha agradecido a España su apoyo en la lucha contra la tiranía populista venezolana. O sea, como Fernando Trueba. Hispanidad redaccion@hispanidad.com