El Banco de Inglaterra ha decidido reducir el precio del dinero al 1% y el Banco Central Europeo los deja en el 2%, aunque los bajará.

Otra medida peligrosa por cuanto el problema sigue siendo el denunciado por el presidente de La Caixa, Isidro Fainé: hemos perdido la noción del riesgo. Por tanto, lo lógico, quizás imposible -lo sé- habida cuenta de lo que la tormenta que nos amenaza, sería subir los tipos al 10%.

En cualquier caso, los tipos de interés pueden ponerse al 0%, -o al menos 1%- que tendría su gracia, pero esa medida no sirve para crear puestos de trabajo. Si el empresario no ve posibilidades de negocios -y no las ve- lo cierto es que nos se va a endeudar. Aunque el banco le preste el dinero, no cerrará puestos de trabajo. Por otra parte, conviene que comiencen a hacerse negocios con fondos propios, no siempre, y al 100 por 100, con deuda.

En cualquier caso, como informamos hoy, Botín miente. Dice que los españoles no le piden créditos. Es cierto, no le piden créditos para comprar pisos -que no se venden- ni para ampliar el negocio -que nadie amplía- pero sí se le pide para pagar las nóminas del mes, y entonces es cuando la entidad les exige avales personales... ¡y a empresas solventes!

Además, la causa de la crisis es la especulación financiera pero su efecto es el paro. La crisis especulativa y de sobre endeudamiento la ha sufrido todo Occidente, pero es en España donde más ha aumentado el paro. Por tanto, el principal culpable del desempleo no son los bancos -decíamos ayer- sino el Gobierno Zapatero, que no ha reaccionado mal, sino que, sencillamente, no ha reaccionado. Primero ha negado la crisis, con lo que ha perdido un tiempo precioso. Luego, ya en déficit, no ha adoptado ninguna media y, finalmente, ha decidido que lo importante es buscar un chivo expiatorio. Ahí sí que el Ejecutivo Zapatero es un maestro: por ahora, es la banca, pero mañana puede ser otro: los empresarios, por ejemplo, o, seguramente, el PP. Los dos más grandes demagogos que ha producido la democracia española, Pepiño Blanco y Leyre Pajín, ya ahondan en esa línea.

Eulogio López

eulogio@hispanidad.com