El director estadounidense donó 70.000 euros al lobby gay
Aburrido de ganar dinero como director y productor, Steven Spielberg sale ahora a la palestra repartiendo unos dólares entre los ideológicamente afines. Para la campaña electoral de Barack Obama ya donó el máximo permitido por la ley: 2.300 dólares (1.500 euros), que se suman a los de Tom Hanks, Halle Berry, George Clooney, Susan Sarandon, Jennifer Aniston o Barbra Streissand.
El cineasta acaba de regalar 100.000 dólares (68.000 euros) al lobby gay del Estado de California, que ha iniciado una campaña en contra de la Proposition 8, que se votará en referéndum en noviembre, coincidiendo con las presidenciales. La Proposition 8 trata consolidar legalmente que el matrimonio es la unión entre un hombre y una mujer. El lobby rosa conoce a través de las encuestas que los ciudadanos votarán a favor de la iniciativa, pero la campaña ha permitido recaudar 16,2 millones de dólares (alrededor de 11 millones de euros) gracias a las sumas aportadas, entre otros, por Brad Pitt o el propio Spielberg.
Resulta curioso el destino de una pequeña parte de la fortuna del director de cine, icono del cine familiar con películas como Hook o Encuentros en la Tercera Fase. Spielberg pone su dinero al servicio del homosexualismo, pero sabe que un extraterrestre acogido por dos hombres casados o un Indiana Jones que utilizara su látigo para otros menesteres no habrían atraído ni la mitad de público.
