Sr. Director:
En primer lugar creo que el titular de la noticia es equivocado, ya que Zaplana no equipara esta unión con lo que es un matrimonio. En segundo lugar, no se puede hablar, es imposible, de algo que no existe. Y lo que aquí no existe es un matrimonio, ya que éste es la unión indisoluble de un hombre y una mujer con el fin de formar una familia. Lo otro es una mera unión que, a mi modo de ver, debe, por supuesto, estar regularizada por la ley, pero a la que jamás se le podrá denominar "matrimonio", ya que no es tal.
Por tanto, que el señor Zaplana no diga matrimonio y si el PP va de progre, va a perder muchos votos. En mi pueblo diríamos que "va de culo": quiero decir que no se puede bajar los pantalones ante lo políticamente correcto.
Alberto Montané
almofr@hotmail.com