El cantante afincado en Miami posee una finca en Ojen, pero defiende la absoluta legalidad de la construcción. Iglesias ha solicitado una entrevista con el propio Zapatero y amenaza con sacar información sobre Manuel Chaves y el socialismo andaluz. Para Moncloa, encausar, aún mejor, encarcelar a Julio Iglesias, quien nunca ha disimulado su apoyo al PP y a José María Aznar, sería un golpe electoral definitivo, sólo apto para elecciones generales. Por su parte, Del Nido siempre se ha considerado hombre próximo al PP, y la situación del Sevilla le convierte en otro "pantojo"
No sabemos si España está crispada, pero si no lo está lo parece. Ante unas elecciones municipales que se viven como unas primarias, y ante un empate técnico entre PSOE y PP, con tantas incógnitas en el ambiente, vale todo. Y así, los estrategas del PSOE, que no están en Ferraz sino en Moncloa, ya sueñan con alimentar al juez Miguel Ángel Torres de nuevos datos que permitan el encausamiento, imputación o encarcelamiento -¿por qué no, después de lo de Isabel Pantoja?- de dos personajes famosos a los que siempre se ha ligado con la derecha en general y con el Partido Popular en particular. Hablamos de José María del Nido, presidente del Sevilla FC, en la cresta de la ola tras conseguir la segunda Copa de la UEFA consecutiva. Un personaje que ya ha sido relacionado con Malaya, y cuyo nombre ya ha sido ‘calentado' en los medios. Como ya se empiezan a decir: otro "Pantojo".
Pero el premio gordo no es le presidente de un club de fútbol, sino el cantante más universal: Julio Iglesias. Tiene todas la papeletas: nunca ha ocultado su proclividad al PP y a José María Aznar, tiene una finca en Ojen, pegadito a Marbella, que en su día compró a Curro Romero, y donde se recluye cuando viene a España, y nunca ha ocultado su relación con la zona. Hasta los prospectos promocionales del lugar citan a Julio Iglesias, pero, hasta el momento, nadie le había relacionado, al menos en este sentido, con nada sucio.
Sin embargo, en el PSOE se vive al borde de un ataque de nervios. Una legislatura estratégicamente preparada para asegurarse el aislamiento de la derecha y la alianza con los nacionalistas, es decir, la permanencia de Zapatero en Moncloa por muchos años, se puede ir al garete por el fracaso, al menos momentáneo, de la negociación con ETA, la parálisis del Estatut y la ruptura irreconciliable entre las dos españas y la guerra mediática, más dura que nunca. Así que ahora vale todo: incluido 'enchironar' a Julio Iglesias.
Eso sí, el músico no va solo por la vida. Lo que se conoce como la Mafia de Miami, es la que creó su figura internacional, y no está dispuesto a que se dilapide ese activo. Por de pronto, Hispanidad ha podido saber que Iglesias va a solicitar una entrevista personal con Rodríguez Zapatero y que desde su círculo amenazan con contraatacar, especialmente con Manuel Chaves, que preside la comunidad más generosa en votos con los socialistas, como objetivo.
Hasta el momento, los rifirrafes entre Julio Iglesias y los socialistas se remiten a los comentarios de Felipe González sobre la residencia fiscal de Iglesias fuera de España. Y le costó caro, porque hizo que don Julio se volcara aún más con el PP de José María Aznar. Pero ahora ya son palabras mayores: no hablamos de cotizar a Hacienda fuera de España, sino de presuntos delitos en un escándalo que ya ha dado con mucha gente en prisión. Además, bastaría otro caso Pantoja para derribar de su pedestal a don Julio.
