La segregación de Metrovacesa se parece cada vez más a un culebrón a los Falcon Crest. El lunes a primera hora informaba a la CNMV sobre la decisión de dividir la compañía en dos, pero no daba detalles de cómo iban a quedar los minoritarios ni de qué activos formarían parte de cada una de las dos empresas finales. Así que hubo que enviar información añadida para clarificar el hecho relevante. A última hora de la tarde del lunes aclara que de lo que en realidad se trata es de una OPA de exclusión. Pánico entre los minoritarios.
El martes, más información a la CNMV para no decir nada. Eso sí, queda claro que a pesar del mensaje inicial los minoritarios saldrán perdiendo. Y no poco, cerca de un 40%. Las acciones de Metrovacesa se valoran a 75,67 euros por título, mientras que las de Gecina se calculan a 129,36. Un escándalo en toda regla que provoca nuevas comunicaciones a la CNMV. Rectificación sobre rectificación.
A todo esto, Conthe prefiere mirar para otro lado. Parece que le basta una conversación con José Manuel Lara, propietario de Planeta, para hacerse una idea del percal. Los minoritarios, mala suerte, que no hubieran entrado en un valor recalentado. Así que, contra todo pronóstico, a las 11 de la mañana de este miércoles regresaba Metrovacesa a la cotización abriendo con un hueco del 20%. A las 15:15, los títulos cotizan a 101,50 con un recorte de 16,35.
Y por cierto ¿qué opina la asociación de accionistas minoritarios? Al cierre de esta edición todavía están preparando su nota de prensa. A eso se le llama actuar en tiempo real.