El modelo de salvamento anglosajón mucho más ineficiente que el continental Zapatero es un optimista antropológico y como tal se permite afirmar que el G20 de Londres va a ser el principio del fin. No parece. Más bien parece que comienza con las posiciones enfrentadas. Previamente Estados Unidos presionaba para que la UE se sumara a un nuevo impulso fiscal mientras que Merckel le paraba los pies apelando a la necesidad de una cierta contención presupuestaria.
Pues bien, Obama insiste en que no será posible salir de la crisis, o al menos se retrasará la recuperación si sólo son los ellos el motor. Sarkozy responde amenazando con no firmar los acuerdos. Así de caliente son los comienzos. Súmenle los antiglobalización de siempre.
Con todo, lo interesante es analizar lo que está pasando con los planes de rescate. El modelo anglosajón se ha revelado como un pozo sin fondo. No hay atisbo de recuperación a pesar de las cantidades ingentes. En cambio el modelo francés de primar a su industria, o el alemán de primar su consumo parece que están empezando a ofrecer signos positivos. La eficiencia del modelo continental es muy superior a la del modelo anglosajón. Y así están las cosas de cara al G20 que comienza este jueves.