El gobernador de Río de Janeiro ya lo dice en voz alta: quiere aprobar la muerte de inocentes
Está en portugués, pero puede leerse muy bien. Es un informe de Carlos Ferreira, donde denuncia el proceso, muy similar al argentino, seguido por el presidente brasileño Lula da Silva para legalizar el aborto en Brasil.
Las mentiras son las habituales en el mercado de la muerte: el presidente Lula comenzó anunciando la apertura de un ‘debate' social sobre el aborto, que es lo que dicen los gobernantes cuando no quieren debatir nada, sino sencillamente legalizar y promocionar el aborto libre y gratuito. Luego, la técnica en iberoamérica consiste en legalizar el aborto en algún estado, lo que dada la unidad de hecho del mercado y la movilidad en el mundo actual, significa una legalización, en la práctica, en todo el territorio nacional. Así se está haciendo en la Argentina y así se esta haciendo en Brasil. El gobernador del Río de Janeiro así lo ha anunciado.
Lula llegó al poder como el apóstol de los pobres. Ahora parece haber adoptado el esquema ONU de que para reducir la pobreza lo mejor es reducir el número de pobres, especialmente antes de que nazcan. Porque la miseria continúa siendo la tónica de Brasil, mientras Lula ha comenzado su segundo mandato envuelto en más casos de corrupción de su Gobierno, escándalos que en nada han afectado a su popularidad.