Además, se declara pro-vida "salvo en los casos de incesto, violación, y para salvar la vida de la madre"El candidato republicano a la presidencia de Estados Unidos, Mitt Romney, se declara 'pro-vida' pero, a la vez, lo último que ha dicho es que no tiene intención de modificar la ley del aborto. Su postura pro-vida es: "Yo creo que el aborto es una opción equivocada, salvo en los casos de incesto, violación, y para salvar la vida de la madre", escribió una vez Romney.
Al parecer, Romney ha cambiado de opinión a lo largo de su carrera política en varias ocasiones respecto al aborto, como narra este artículo de El País.
Pero que Romney no tenga planes de modificar la ley del aborto significa que en EEUU se puede abortar porque es legal en todos los estados desde la sentencia de la Corte Suprema en el Caso Roe contra Wade, de 22 de enero de 1973. La Corte Suprema de Justicia de los EEUU, en esa fecha, estableció que la mujer tiene el derecho a la libre elección -entendida como "derecho a la privacidad o intimidad"- que protegería la decisión de llevar o no llevar un embarazo a término. La Corte clasificó este derecho como fundamental por lo que toda violación de ese derecho fundamental a la privacidad por parte del gobierno debería estar justificada.
A la vez, Romney ha vendido durante toda su campaña su postura pro-vida. Por ejemplo, oponiéndose al Planned Parenthood, un sistema de clínicas abortistas sin ánimo de lucro, a las que dijo retirará todos los fondos públicos federales. Y también dijo que reinstaurará una iniciativa para dejar de dar fondos a organizaciones estadounidenses que promuevan el aborto en países extranjeros.
Esta es la postura pro-vida de Romney: no modificará las leyes abortistas de EEUU y se opone al aborto excepto en "casos de incesto, violación, y para salvar la vida de la madre".
Y es que, como dice el artículo de El País, "son muchos los votos independientes y moderados que hay en juego, y con ellos puede ganar Estados como Ohio o Florida, y en consecuencia la nación. Y eso bien vale un desmentido a uno mismo".
José Ángel Gutiérrez
joseangel@hispanidad.com
Al parecer, Romney ha cambiado de opinión a lo largo de su carrera política en varias ocasiones respecto al aborto, como narra este artículo de El País.
Pero que Romney no tenga planes de modificar la ley del aborto significa que en EEUU se puede abortar porque es legal en todos los estados desde la sentencia de la Corte Suprema en el Caso Roe contra Wade, de 22 de enero de 1973. La Corte Suprema de Justicia de los EEUU, en esa fecha, estableció que la mujer tiene el derecho a la libre elección -entendida como "derecho a la privacidad o intimidad"- que protegería la decisión de llevar o no llevar un embarazo a término. La Corte clasificó este derecho como fundamental por lo que toda violación de ese derecho fundamental a la privacidad por parte del gobierno debería estar justificada.
A la vez, Romney ha vendido durante toda su campaña su postura pro-vida. Por ejemplo, oponiéndose al Planned Parenthood, un sistema de clínicas abortistas sin ánimo de lucro, a las que dijo retirará todos los fondos públicos federales. Y también dijo que reinstaurará una iniciativa para dejar de dar fondos a organizaciones estadounidenses que promuevan el aborto en países extranjeros.
Esta es la postura pro-vida de Romney: no modificará las leyes abortistas de EEUU y se opone al aborto excepto en "casos de incesto, violación, y para salvar la vida de la madre".
Y es que, como dice el artículo de El País, "son muchos los votos independientes y moderados que hay en juego, y con ellos puede ganar Estados como Ohio o Florida, y en consecuencia la nación. Y eso bien vale un desmentido a uno mismo".
José Ángel Gutiérrez
joseangel@hispanidad.com
