Sr. Director:

Ignoro qué se nos ha perdido en Haití. Zapatero y Bono se han empeñado en mandar tropas allá. Ahora resulta que vamos a pasar el charco que desde el 98, cuando la guerra de Cuba, llevamos sin cruzar militarmente. Pero no vamos solos, sino junto a las tropas marroquíes. Y todos contentos a juzgar por las sonrisas de ZP y Mohamed VI en reciente foto. Vivir para creer. Hombre... ni pelearse por un islote como Perejil alzando tensas hostilidades diplomáticas, ni tampoco ese compadreo de repente entre el monarca alahuita y el inquilino de La Moncloa. Sí, ya sé, que la ocasión la pintan calva y había que aprovecharla. Vale que debemos llevarnos bien con Marruecos restableciendo óptimas y fluidas relaciones bilaterales, pero variar de posición diplomática respecto al tema del Sahara, abandonando la idea del referéndum viniendo así a coincidir con la postura de Mohamed VI, es un camino equivocado. Tanto como el que ambos mandatarios decidan enviar tropas a Haití.

Resulta contradictorio que después de retirar nuestros soldados de Iraq haciendo gala de su idealismo y pacifismo casi prometiendo no más intervenciones militares exteriores excepto bajo la ONU, Zapatero apoye ahora el envío de tropas a la isla caribeña. O se es pacifista y no-intervencionista para todo o para nada. En Iraq no, -¡vaaale... aceptamos barco!- pero en Haití sí, y en Afganistán también. Craso error diplomático.

Los votantes del PSOE en su inmensa mayoría son no-intervencionistas, pacifistas y antibelicistas. Sólo se acepta la actuación militar dentro de nuestro territorio y en caso de que alguien de fuera nos ataque... pero llevar la guerra nosotros allende los mares y por distintos lugares del mundo no es de recibo, señor Zapatero.

Haití es una isla cuya situación difiere bastante de la iraquí o afgana, siendo consecuencia de mafias que apoyó el ex-presidente Aristide y que se han adueñado de Haití aprovechando el caos y el descontrol. Son como yo llamo: "Asuntos internos, que atañen a la seguridad ciudadana callejera". No es comparable ni argumentable con los genocidios, terrorismo internacional y crímenes a la humanidad de Iraq, por ejemplo.

Zapatero se equivoca, además, al arrastrar a Marruecos a una intervención militar en Haití que la misma ONU no ha encabezado aún -ni creo que lo haga, tal vez porque no se atreve o porque no reúne las características para que una alianza internacional intervenga-. Y como Mohamed VI se apunta a un "bombardeo" -valga el símil-, o a cualquier "sarao", para ganar puntos bajo el manto protector de EE.UU y del compadreo español de forma que cada vez avance más de cara a entrar en la CEE e incluso en la OTAN con el argumento de estratégico "país ribereño" mediterráneo, pues eso. Al Caribe tocan.

De Afganistán no deseo que nuestros soldados vayan, y cuya anunciada intervención me parece igualmente absurda e innecesaria. En conclusión, que nuestros soldaditos junto a los de Marruecos se nos van al Caribe. Y no de vacaciones, precisamente.

Mi amigo Curro, legionario para más señas en el Tercio malagueño -ascendido a sargento tras ser herido en los Balcanes y en Iraq- me ha dicho muy contento que se apunta a la expedición "porque esa isla es pequeñica y en cuatro tiros ‘tó controlao', será chupao, vamos, un paseíllo... como mi tocayo; me voy de vacaciones al Caribeeee", asegura. ¡Pobrecillo! Allí, no creo que se acuartele en hoteles de 5 estrellas. Eso sí, le he dicho que se lleve sus amuletos contra el mal de ojo y las estampitas del Cristo de la Buena Muerte. No sea que  lo hechicen a base de ritos vudús y lo conviertan en un zombie. La herencia de Aristide aún se palpa en el aire de Haití. ¡Que Dios proteja a nuestros soldados! Y amigo Curro... si te vas al Caribe... de legionario... ¡¡vuelve pronto, pero sin hechizos!!

Josep Esteve Rico

ricosogorb@cjav.org