El Gobierno Obama ha sido denunciado por otras 42 organizaciones católicas por obligarle a comprar seguros de salud con anticoncepción y fármacos abortivosUn total de 43 organizaciones católicas de Estados Unidos han demandado al Gobierno del presidente de EEUU, Barack Obama, por obligarles, desde agosto de 2013, a comprar seguros de salud que incluyen la anticoncepción y fármacos abortivos. Estas entidades aducen que dicho mandato viola su libertad religiosa.
Según el arzobispo de Nueva York, cardenal Timothy Dolan, se trata de "una muestra comprometida de la unidad de la Iglesia en defensa de la libertad religiosa". "Hemos intentado negociar con la administración y la legislación en el Congreso -y lo seguiremos haciendo- pero aún no hay nada". "El tiempo se está acabando y nuestros valiosos ministerios y derechos fundamentales penden de un hilo, así que ahora vamos a las cortes".
Como se recordará, la decisión de la administración Obama fue contestada por la comunidad católica estadounidense: laicos y clero en general. En este caso, las demandas han sido presentados por varias diócesis, hospitales, universidades y organizaciones católicas de diversa índole. Por ejemplo: las arquidiócesis de Nueva York y Washington; o universidades como la Catholic University of America, la Franciscan University of Steubenville o la University of Notre Dame.
En este último caso concreto, el rector de Notre Dame, P. John Jenkins, dijo que el juicio fue presentado "ni ligera o alegremente, sino con una sobria determinación". "No buscamos imponer nuestras creencias religiosas a otros", explicó en un correo electrónico a los trabajadores de la Universidad, "sino que simplemente pedimos al gobierno que no imponga sus valores a la Universidad cuando esas perspectivas están en conflicto con nuestra enseñanza religiosa".
Pero, paradójicamente, se da la circunstancia de que, como recuerda Wikipedia, la Universidad de Notre Dame otorgó un doctorado "honoris causa" al presidente Barack Obama el 17 de mayo de 2009. Y entonces el mismo rector de Notre Dame, Padre John I. Jenkins, alegó que el premio a Obama quería reconocer su histórica elección y su programa de lucha contra la pobreza. Sin embargo, numerosos católicos protestaron porque el honor se concedía a una persona decididamente impulsora del aborto (una de sus primeras medidas al asumir la presidencia fue levantar el veto a la financiación federal para promover el aborto en el extranjero). Más de 50 obispos estadounidenses y 300.000 ciudadanos manifestaron su rechazo a la distinción a Obama, y la ex embajadora nortamericana Mary Ann Glendon, profesora de Derecho en Harvard, rechazó recibir la medalla Laetare Medal de la universidad, que le sería impuesta en la misma ceremonia a la que estaba invitado Obama.
Bienvenido sea, si es así, el cambio en Notre Dame. Porque la defensa de la vida es asunto tan importante que merece actitudes claras y no 'políticamente correctas'.
Por lo pronto, el Gobierno de Obama tendrá que hacer frente a estas demandas. Y parece ser que en EEUU, la Justicia sí funciona con independencia...
José Ángel Gutiérrez
joseangel@hispanidad.com
Según el arzobispo de Nueva York, cardenal Timothy Dolan, se trata de "una muestra comprometida de la unidad de la Iglesia en defensa de la libertad religiosa". "Hemos intentado negociar con la administración y la legislación en el Congreso -y lo seguiremos haciendo- pero aún no hay nada". "El tiempo se está acabando y nuestros valiosos ministerios y derechos fundamentales penden de un hilo, así que ahora vamos a las cortes".
Como se recordará, la decisión de la administración Obama fue contestada por la comunidad católica estadounidense: laicos y clero en general. En este caso, las demandas han sido presentados por varias diócesis, hospitales, universidades y organizaciones católicas de diversa índole. Por ejemplo: las arquidiócesis de Nueva York y Washington; o universidades como la Catholic University of America, la Franciscan University of Steubenville o la University of Notre Dame.
En este último caso concreto, el rector de Notre Dame, P. John Jenkins, dijo que el juicio fue presentado "ni ligera o alegremente, sino con una sobria determinación". "No buscamos imponer nuestras creencias religiosas a otros", explicó en un correo electrónico a los trabajadores de la Universidad, "sino que simplemente pedimos al gobierno que no imponga sus valores a la Universidad cuando esas perspectivas están en conflicto con nuestra enseñanza religiosa".
Pero, paradójicamente, se da la circunstancia de que, como recuerda Wikipedia, la Universidad de Notre Dame otorgó un doctorado "honoris causa" al presidente Barack Obama el 17 de mayo de 2009. Y entonces el mismo rector de Notre Dame, Padre John I. Jenkins, alegó que el premio a Obama quería reconocer su histórica elección y su programa de lucha contra la pobreza. Sin embargo, numerosos católicos protestaron porque el honor se concedía a una persona decididamente impulsora del aborto (una de sus primeras medidas al asumir la presidencia fue levantar el veto a la financiación federal para promover el aborto en el extranjero). Más de 50 obispos estadounidenses y 300.000 ciudadanos manifestaron su rechazo a la distinción a Obama, y la ex embajadora nortamericana Mary Ann Glendon, profesora de Derecho en Harvard, rechazó recibir la medalla Laetare Medal de la universidad, que le sería impuesta en la misma ceremonia a la que estaba invitado Obama.
Bienvenido sea, si es así, el cambio en Notre Dame. Porque la defensa de la vida es asunto tan importante que merece actitudes claras y no 'políticamente correctas'.
Por lo pronto, el Gobierno de Obama tendrá que hacer frente a estas demandas. Y parece ser que en EEUU, la Justicia sí funciona con independencia...
José Ángel Gutiérrez
joseangel@hispanidad.com