Alta tensión en el Gobierno Zapatero a cuenta de la propuesta de financiación autonómica realizada por Pasqual Maragall. La vicepresidenta De la Vega insiste en la mima línea de lo ya manifestado por Zapatero y Solbes: La decisión se tomará entre todos en el ámbito del Consejo de Política Fiscal y Financiera. Por cierto, curioso que Bono no quisiera entrar a ese trapo y cediera los trastos a la vice, sin duda de mayor autoridad. Humilde que es el chico.
De la Vega no quería salirse del guión. Pero lo hizo. Buena muestra de que la cuestión inquieta, y mucho, en el seno del Gobierno. Repasa los principios que maneja el Gobierno en relación al modelo de financiación autonómica: mejora de los recursos de los gobiernos autonómicos, mejora de la autonomía financiera y mantenimiento del sistema de solidaridad. Hasta aquí, nihil novum, pero la vice se debió de calentar y afirmó que la propuesta catalana representa un cambio sustancial y que no va en la dirección apuntada desde el Gobierno.
Por lo tanto, la propuesta catalana es considerada por el Gobierno como susceptible de negociación. Eso sí, aclara que no será la base de la negociación y que será debatida después de que el Gobierno haya realizado una valoración conjunta del actual modelo de financiación autonómica. Además, De la Vega afirmó que desconoce si Zapatero tenía previsto un encuentro con Maragall para hablar sobre estos temas.
