Sr. Director:  

Leo con asombro la edición del día 12 de febrero de 2004 de Hispanidad, donde defiende el incumplimiento de los compromisos de la Nación Argentina con los mercados internacionales; entre otras muchas inexactitudes, habla usted de "capitales especulativos, que son los que acuden a las emisiones de deuda". Sin duda, su concepto de especulativo es peyorativo, opinión que cualquiera que haya estudiado economía no puede compartir, pero es que además si analiza la composición de los tenedores de deuda argentina, se encontrará con un elevado porcentaje en manos de fondos de pensiones europeos, japoneses y norteamericanos… si usted considera especuladores a los ahorradores medios de cualquier país occidental, empiezo a ver cuál es su modelo de sociedad futura, mucho más parecido a la unión soviética que a la civilización occidental. 

Cuando alguien pide prestado y se compromete a devolver la suma en una fecha prefijada, exigir el cumplimiento del compromiso no es ninguna acción deshonrosa, es un derecho que asiste al prestamista, sea este George Soros o un pensionista francés o alemán. En caso contrario, todos podríamos endeudarnos hasta el infinito y después negarnos a honrar nuestros compromisos con la excusa de "que la deuda ahoga nuestras finanzas públicas". 

Y, defender lo contrario, es demagogia. De la barata.

Juan Travado 

juan.travado.navarro@accenture.com