Un dato importante en la nueva ley de educación es la aparición en el Anteproyecto de la asignatura de Religión, por completo ausente en el texto de septiembre.
El nuevo Anteproyecto recupera ahora el pleno valor académico de la asignatura de Religión para la que en Educación Primaria y en ESO se establezcan alternativas a la Religión (católica, evangélica, musulmana o judía), concretamente Valores culturales y sociales en Primaria y Valores Éticos en ESO.
Aparecen en todos los cursos de dichas etapas y la elección de una u otra alternativa (Religión o Valores culturales y Sociales) (Religión y Valores Éticos) se deja en manos de los padres o tutores. Respecto al Bachillerato, Religión aparece en ambos cursos como una de las asignaturas específicas que pueden ser cursadas; el modelo hace innecesaria la alternativa.
Para el presidente de Profesionales por la Ética, "la recuperación del valor académico de la asignatura de Religión como opción libre para los padres representa, sin duda, una mejora importante del Anteproyecto. Queda únicamente por conocer si las asignaturas alternativas (y por tanto voluntarias) a Religión son las adecuadas o, si por el contrario, reproducen de nuevo el conflicto debido a la imposición por el Estado de valores éticos, un papel que no le corresponde".