Desconcierto en los concesionarios por el plan 2.000 euros No hay nada claro. Desinformación de los concesionarios cuando el cliente acude para preguntar por las ayudas al Gobierno. Desde Faconauto apelan en Intereconomía a la incertidumbre y preocupación por la aplicación de la propuesta.
Trataremos de ayudar a clarificar. Primero: la medida se anuncia para vehículos nuevos sin necesidad de achatarrar el antiguo. Pero ahora se ha extendido a vehículos hasta con 5 años de antigüedad y si se pacta con CiU a motocicletas. PP y ERC proponen que se aplique también a vehículos pesados y agrícolas. De los 2.000 autobuses no se ha vuelto a hablar.
Más. ¿Participarán las CCAA? El Gobierno pretende un acuerdo unánime, pero no lo impone. No puede hacerlo. Así que la comunidad que se quiera sumar, lo hará; el resto, no. Cataluña, por ejemplo, que se había negado, parece quererse sumar ahora a la propuesta. Porque como apuntan muchos expertos, se puede producir un turismo fiscal para ahorrarse el impuesto.
Por último: ¿Además de las ofertas que están realizando marcas y concesionarios, habrá 1.000 euros adicionales? La respuesta es no. El sector considera que ya ha hecho un esfuerzo importantísimo y que ese esfuerzo son los 1.000 euros de Zapatero. Conclusión: de los 2.000 euros prometidos por el presidente nos podemos encontrar con 500.
Una última cosa: en lugar de cobrar el impuesto de matriculación con una mano y de devolverlo con otra en forma de ayuda graciosa, ¿no sería mejor rebajar o suprimir el impuesto de matriculaciones? A los gobiernos les encanta repartir cheques, bonos sociales y ayudas directas.
Trataremos de ayudar a clarificar. Primero: la medida se anuncia para vehículos nuevos sin necesidad de achatarrar el antiguo. Pero ahora se ha extendido a vehículos hasta con 5 años de antigüedad y si se pacta con CiU a motocicletas. PP y ERC proponen que se aplique también a vehículos pesados y agrícolas. De los 2.000 autobuses no se ha vuelto a hablar.
Más. ¿Participarán las CCAA? El Gobierno pretende un acuerdo unánime, pero no lo impone. No puede hacerlo. Así que la comunidad que se quiera sumar, lo hará; el resto, no. Cataluña, por ejemplo, que se había negado, parece quererse sumar ahora a la propuesta. Porque como apuntan muchos expertos, se puede producir un turismo fiscal para ahorrarse el impuesto.
Por último: ¿Además de las ofertas que están realizando marcas y concesionarios, habrá 1.000 euros adicionales? La respuesta es no. El sector considera que ya ha hecho un esfuerzo importantísimo y que ese esfuerzo son los 1.000 euros de Zapatero. Conclusión: de los 2.000 euros prometidos por el presidente nos podemos encontrar con 500.
Una última cosa: en lugar de cobrar el impuesto de matriculación con una mano y de devolverlo con otra en forma de ayuda graciosa, ¿no sería mejor rebajar o suprimir el impuesto de matriculaciones? A los gobiernos les encanta repartir cheques, bonos sociales y ayudas directas.