Las cifras contrastan. Mientras que España acumula un déficit comercial galopante fruto de nuestra pérdida de competitividad, en Europa se recogen récords de superávits. El pasado mes de junio se registró su superávit de 6,5 millones de euros, frente a los 2,7 millones registrados el mes de mayo, según ha publicado Eurostat. No obstante, si se corrige el efecto del calendario (días laborales vs días festivos), el superávit quedaría corregido quedando en 3,4 millones de euros.
Ello ha sido posible gracias a la buena evolución de las exportaciones, señal de la salud de la competitividad de la economía europea. Un proceso contrario al que se está produciendo en la economía española, donde la pérdida de competitividad está lastrando preocupantemente las exportaciones y nuestro peso económico. El déficit comercial supone ya el 6% de nuestro PIB.