Señala que la Comunidad de Madrid es ‘business friendlier'

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, sale al paso del populismo hispanoamericano. Participaba en la mañana de este lunes en la XXXIV Asamblea de la Asociación Iberoamericana de Cámaras de Comercio celebrado en el IFEMA madrileño. Rodeada de empresarios de las 20 naciones hermanas, Aguirre arremetió duramente contra los populismos: "No existen atajos milagrosos a la prosperidad".

Así que el único camino para el progreso es el respeto de las leyes y la garantía de la seguridad jurídica. Un discurso que califica de "vital" frente a los viejos atajos del populismo. Liberalismo y seguridad jurídica generan bienestar. Es lo que dice el mapamundi de la transparencia y el desarrollo. Una curiosa coincidencia. Por el contrario, los populismos no generan esos ‘círculos virtuosos', sino que "convierten la pobreza en miseria y aniquilan la libertad".

Aguirre

aprovechó también para ‘vender' la Comunidad de Madrid como una región que ha conseguido convertirse en la nº 1 de España "sin recursos naturales ni salida al mar". ¿La receta? "La confianza generada a los inversores, porque hemos decidido ser ‘business friendliers'", explica Aguirre. Y eso significa tomar decisiones de Gobierno sin preferencias, sin intervensionismo, bajando los impuestos, con unas cuentas públicas ortodoxas y removiendo los obstáculos a las inversiones productivas. Vamos, exactamente lo contrario de la práctica de los Kirchner y Chaves.