Este jueves, 18 de septiembre, tiene lugar el referéndum para decidir si Escocia debe ser un país independiente del Reino Unido.
Tras un acuerdo entre el Parlamento de Edimburgo y el Parlamento de Londres, la pregunta formal de la consulta es: ¿Debería Escocia ser un país independiente Sí o No. Salta a la vista que no se andan con muchas vueltas, ni en Edimburgo ni en Londres.
En quienes visualizan una Escocia independiente, por tanto fuera del Reino Unido y por tanto de la Unión Europea (UE), hay dudas sobre la posibilidad de seguir empleando la libra, su mejor opción dado el temor a un largo retraso en el reingreso en la UE y la posible adopción del euro.
Por estas y otras razones económicas hay empresarios que están en contra. En los últimos días de campaña el debate se ha centrado básicamente en temas económicos.
Todo da a indicar que este jueves Escocia hablará de economía más que de sentimientos y la intención de votar llega al 80%, señal de que el asunto desata interés. Ante la deriva tomada por esta campaña cabe preguntarse: ¿afectará en Cataluña -y en el resto de España, claro- el debate en clave económica del Reino Unido
Pedro García