Vegara había señalado por la mañana que la aprobación del Fondo estaba pendiente del dictamen del Consejo de Estado
Tras la reunión del jueves por la noche entre Solbes y Montoro, ambos acordaron que seguirían perfilando el consenso. Tenían tiempo porque el Fondo requería del dictamen del Consejo de Estado. Por lo tanto tendrían una semana para seguir hablando. El viernes por la mañana el secretario de Estado de Economía, David Vegara, presenta el Fondo a los periodistas económicos y les advierte que es un borrador pendiente del dictamen del Consejo de Estado.
Sin embargo, al llegar al Consejo de Ministros, el Fondo se aprueba. Solbes informa que en el mismo Consejo se dieron cuenta de que no era necesario el informe preceptivo del Consejo de Estado. Una de dos: o estamos ante el reino de la chapuza o se la han intentado colar al PP. Más bien parece lo segundo. La estrategia parece ser la siguiente: el plan está diseñado en la brocha gorda por el propio Zapatero tras su encuentro con los banqueros. El lápiz fino es de Solbes. Pero a Solbes no le permiten seguir negociando. Prefieren más bien darle con queso a los peperos.
Y así no es extraño que el sábado saliera Rajoy anunciando que el plan se había aprobado sin consenso (no como en Estados Unidos que han actuado como lo que son: una democracia) y que Zapatero pretendía ayudar a sus amiguetes (en referencia a los banqueros) y no a las PYMES. Desde el entorno de Montoro se afirma que el plan Zapatero fue impulsado por el propio presidente sin el beneplácito de Economía. Y advierten que no van a aprobar un plan que beneficia sólo a los banqueros y deja a las PYMES más secas que la mojama.