El Banco de España ha hecho pública la balanza de pagos en mayo de 2006 en la que se contabilizó un déficit por cuenta corriente de 5.706,9 millones de euros, lo que representa un incremento de 308,8 millones respecto a los 5.398,1 registrados 12 meses antes. Es decir, nuestro sector exterior empeora un 5,7% en el último año.
La autoridad monetaria explica que esta mala evolución se explica principalmente por el fuerte incremento del déficit comercial, aunque la reducción de la balanza de servicios y el incremento del déficit de la balanza de transferencias corrientes también contribuyeron a la ampliación del desequilibrio por cuenta corriente, compensado sólo en parte por la corrección del déficit de balanza de rentas.
En cuanto a la balanza comercial, se incrementó en el mes de mayo hasta alcanzar los 6.744,8 millones de euros desde los 5.632,1 millones registrados en el mismo mes del año anterior. Las importaciones crecieron un 16,8% frente al ritmo de crecimiento de las exportaciones, situado en el 15,6%.
En resumen: el sector exterior marcha mal, según las primeras estimaciones de un Banco de España bajo la batuta del nuevo gobernador, Miguel Ángel Fernández Ordóñez. Y los datos contrastan con el inexplicable optimismo gubernamental que prevé que en el segundo semestre de este año y el próximo ejercicio, el déficit exterior drene menos al crecimiento económico.
