• Zaplana dirige la coreografía de Aznar en el siglo XXI.
  • Y Piqué se echa al monte: ya ha perdido todas las posibilidades de ser vicepresidente o de presidir IAG.
  • Los antimarianistas quieren captar a Rodrigo Rato, pero el ex director del FMI no está por la labor.
  • Y el equipo económico -Montoro, Guindos, Serra- ya 'sufre' la coordinación de Soraya.
  • Rajoy se hace fuerte con sus cinco colaboradoras: Cospedal, Soraya, Pastor, Báñez y Carmen de Castro.

Escribo ante de que -tarde del lunes- Aznar (en la imagen) se suba al estrado del Club Siglo XXI y desgrane sus recetas políticas. Tras la entrevista de A-3 TV y el casi inocultable cabreo de Moncloa con el ex presidente, los marianistas empiezan a sentirse rodeados por este resurgimiento del Aznarismo.

El ex ministro Eduardo Zaplana es el coreógrafo de la presentación de Aznar en el Siglo XXI. Rajoy prescindió pronto del valenciano.

Otro antiguo peso pesado, ahora apuntado al Aznarismo, es Josep Piqué, actual presidente de Vueling. El catalán brama porque Rajoy ha decidido que Soraya Sáenz de Santamaría no sólo sea vicepresidenta política sino también económica, justo el cargo que ansiaba Piqué.

Y el otro escalafón, privado, que quería ascender era el de la Presidencia de IAG, aprovechando el enfrentamiento que la ministra de Fomento, Ana Pastor, ha tenido con Antonio Vázquez por el plan de reconversión de Iberia. Ha perdido el tren y su primera reacción consistió en echar un jarro de agua fría sobre el futuro económico del país, justo 24 horas después de que Rajoy comenzara su cruzada por el optimismo, bajo el lema "lo peor ya ha pasado". La esposa de Piqué, Gloria Lomana, fue la entrevistadora de Aznar en A-3 TV.

Y el equipo económico tampoco está eufórico. Soraya ya ha hecho valer su primacía en la Comisión Delegada del Gobierno para Asuntos Económicos, sobre Cristóbal Montoro, Luis de Guindos y José Manuel Soria.

Queda Rodrigo Rato, el ex jefe de Montoro y Guindos, aunque es difícil que el ex director del FMI, además de su cuitas judiciales, vuelva a figurar en el equipo Aznar, el mismo que eligió a Mariano Rajoy, y no a él como sucesor.

Pero en el entretanto, Mariano Rajoy no pierde el tiempo. Se ha enrocado junto a sus cinco mujeres más leales: la secretaria general del Partido, Dolores de Cospedal, la mencionada Soraya, su mano derecha, la titular de Fomento, Ana Pastor, la de Empleo, Fátima Báñez y su secretaria de Estado de Comunicación, Carmen Martínez de Castro. Ninguna de ellas hizo carrera con Aznar.

Miriam Prat

miriam@hispanidad.com