• Y encima, Catalunya Caixa y Novagalicia Banco quieren el mismo trato que el otorgado a Goirigolzarri.
  • Los que más sufren, los bancos medianos: Popular, Sabadell y Bankinter.
  • Así como las cajas fusionadas, especialmente las cuatro medianas: Unicaja, Ibercaja, Liberbank y Mare Nostrum.
  • Pero el Guindos II provoca problemas hasta en Santander, BBVA y Caixa.
  • Y a todo esto, todavía nadie comprende por qué el Gobierno no decidió cerrar BFA.

 

Increíble pero cierto. El problema no es que la cotización de Bankia se haya hundido aún más tras hacerse público el plan de saneamiento pagado con fondos públicos (por el momento 23.000 millones de euros). Eso era lógico. A fin de cuentas, el saneamiento se ha estructurado como una ampliación de capital, primero de BFA, luego de Bankia. Por tanto, es lógico que siga a la baja.

No, lo peor es que la cifra mágica de Bankia -los 23.000 millones de euros- ha provocado que las expectativas sobre la cantidad que necesitarán otros bancos en saneamiento. Por ejemplo, Catalunya Caixa y Novagalicia Banco.

Además, Oriol Pujol, siempre solícito ante las necesidades del país, ya ha pedido que el Estado apoye a Catalunya Caixa con la misma intensidad que a Bankia. Y el aún más solícito Rubalcaba -si le das la espalda, te la clava- está empeñado en llegar a la Moncloa a través de la crisis de Bankia. Precisamente el PSOE, quien ayudó a la CAM, cinco veces menor, lo mismo que a Bankia.

Pero el problema es que la sombra de la duda se cierne sobre todo el sector bancario, especialmente sobre los bancos medianos. Popular ha sufrido un castigo en bolsa absolutamente injustificado. Ahora mismo ya vale menos que el Sabadell, a quien años atrás más que duplicaba en valor. El propio Sabadell, junto a Bankinter, sufre el castigo más duro. No sólo eso, las cuatro cajas fusionadas, calificadas ahora como los nuevos bancos medianos -Liberbank, Unicaja, Ibercaja y Mare Nostrum- también se venden a precio de saldo.

Y es más, el Plan Guindos II asusta hasta las tres grandes entidades: Santander, BBVA y Caixa, quienes también están en disposición de venta de activos, a pesar de su solidez patrimonial.

Y todo esto, nadie comprende por qué el Gobierno no liquidó BFA, la matriz de Bankia. De los 19.000 millones de ayuda directa, 7.000 son para el BFA y 12.000 para Bankia: ¿No habría sido más sencillo liquidar la deuda avalada por el FROB en BFA y con el resto pagar preferentes y subordinadas... si fuera posible?

Y a todo esto, resulta que Rajoy insiste en que el Gobierno salvará a todos y cada uno de los bancos españoles. "A bodas me convidan" han dicho los especuladores.

Ahora bien, la crisis bancaria no es nada comparada con la crisis de deuda soberana. Y Europa continúa en silencio.

Eulogio López

eulogio@hispanidad.com