El ex presidente considera que el fenómeno de vivir por encima de las posibilidades fue mundial Lunes por la tarde, céntrico hotel de Madrid. Lleno hasta la bandera. Aznar presentaba su libro de recetas para salir de la crisis. Actuaban de teloneros Jaime Mayor Oreja y Manuel Pizarro. Aznar recordó que recibió una herencia de 23% de paro, 7% de déficit, 70% de deuda, los tipos en el 12% y 4 devaluaciones consecutivas de la peseta. No cumplíamos ninguno de los requisitos para entrar en la moneda única.
Sin embargo, fue esa llamada a un esfuerzo colectivo con una meta concreta la que perrmitió que España hiciera los deberes, cumpliera Mastricht y se convirtiera en el milagro económico europeo. Pasamos de los países PIGS a los países del euro. El expresidente se recrear en que España creaba entonces más empleo que Francia, Alemania y Gran Bretaña juntos. Ahora creamos más desempleo que Francia, Alemania y Gran Bretaña juntos; no es lo mismo crear 5 millones de empleos que destruir 5 millones de empleos. Aplausos a rabiar.
Por último, señaló que la actual crisis económica es una crisis política. El zapaterismo ha sido -en su opinión, siempre en pasado- subida de impuestos, exceso de gasto público, intervención pública en la economía, debilitamiento de las instituciones, alergia al emprendedor, ruptura de la unidad de mercado, y estatutos que debilitan al Estado. Así que para darle la vuelta a la crisis, hay que cambiar la política: rebaja de impuestos, menos gasto público y fortalecimiento del Estado. Zapatero le ha comprado el libro. O al menos, las recetas.
Sin embargo, fue esa llamada a un esfuerzo colectivo con una meta concreta la que perrmitió que España hiciera los deberes, cumpliera Mastricht y se convirtiera en el milagro económico europeo. Pasamos de los países PIGS a los países del euro. El expresidente se recrear en que España creaba entonces más empleo que Francia, Alemania y Gran Bretaña juntos. Ahora creamos más desempleo que Francia, Alemania y Gran Bretaña juntos; no es lo mismo crear 5 millones de empleos que destruir 5 millones de empleos. Aplausos a rabiar.
Por último, señaló que la actual crisis económica es una crisis política. El zapaterismo ha sido -en su opinión, siempre en pasado- subida de impuestos, exceso de gasto público, intervención pública en la economía, debilitamiento de las instituciones, alergia al emprendedor, ruptura de la unidad de mercado, y estatutos que debilitan al Estado. Así que para darle la vuelta a la crisis, hay que cambiar la política: rebaja de impuestos, menos gasto público y fortalecimiento del Estado. Zapatero le ha comprado el libro. O al menos, las recetas.