En plena Guerra Fría e inmersos en la carrera espacial los altos mandos de Estados Unidos están obsesionados con ser los primeros en alunizar, pero ni la opinión pública está motivada, al estar impactados con las bajas causadas en la  Guerra de Vietnam, ni los políticos parecen estar a su favor. Por ello, la NASA se empeña en mejorar la imagen, motivo por el que  contrata  a la considerada número uno de marketing, Kelly Jones, que tendrá sus más y sus menos con el director de lanzamiento, el serio y poco amante de enredos, Cole Davis. Pero cuando la Casa Blanca ve complicada la misión, Jones recibe la orden de poner en marcha un plan B: creando un escenario que imite un falso alunizaje… Nunca la llegada del hombre a la luna había sido abordada de una forma tan divertida como en esta comedia dramática.

Los amantes de las conspiraciones se frotarán las manos y disfrutarán con esta historia que incide en el mensaje que repitieron los rusos en aquellos años sobre que la llegada a la luna de los estadounidenses había sido un montaje y que muchos ciudadanos de otras partes del mundo creyeron. Pero toda esta trama, llevada a imágenes, es un delicioso divertimento en el que no falta la lucha de sexos, el romanticismo y, de nuevo, una crítica a los servicios secretos estadounidenses que trabajan en la sombra. A este respecto, Woody Harrelson está magnífico haciendo de intrigante y oscuro agente. En cuanto a la pareja protagonista está encarnada por Scarlett Johansson, fantástica en su papel de vendedora de humo que también es productora del film junto con el veterano director Ridley Scott. A su lado, un poco expresivo Channing Tatum,  

Fly me to the moon, que toma el título de la famosa canción que cantaba de forma admirable Frank Sinatra, es un divertimento que se ve de un tirón, sin profundizar demasiado, pero que, a cambio, tiene una excelente puesta en escena y una banda sonora pegadiza, aunque les adelanto que no escucharán a “la Voz” . El desconocido director del film  Greg Berlanti hasta el momento se ha fogueado en series de televisión.

Para: los que quieran ver una película simpática y de contenido blanco sobre la carrera espacial.