• Ya ha decidido su nicho: no habrá televisión en abierto.
  • Tampoco habrá canales dedicados a la información ni casi ninguna otra cosa en abierto.
  • Sigue sin haber acuerdo en Champions y continúa el cabreo en Liga.
  • Convención de personal. Por primera vez, abierta a los 125.000 empleados, no sólo a los directivos.
  • Como el Santander: el bonus se considera según la satisfacción del cliente. Cosa difícil de medir.
  • Rafael Nadal enseña gestión a los de Telefónica: humildad y esfuerzo.
La convención de Telefónica, inaugurada este lunes por César Alierta, ha dejado bien tranquilo al Duopolio televisivo -ya saben, Mediaset y Atresmedia-. El presidente de la teleco ha asegurado que no irá a por la televisión en abierto. Su nicho está exclusivamente en la televisión de pago. La verdad es que había cierto nerviosismo en la sede de los dos grupos mediáticos. La hipotética irrupción de Telefónica en la televisión en abierto podría alterar la situación actual, tan favorable para sus intereses, esto es, podría suponer el principio del fin del duopolio televisivo. Recuerden que la teleco se había planteado crear canales dedicados a la información -del estilo del Canal 24 Horas-, pero al final ha decidido desechar la idea. Eso, en cuanto a los planes de futuro. En el presente, continúa sin haber acuerdo entre Telefónica y Mediapro para emitir la Champions. Roures no baja de los 180 millones de euros, cantidad que Alierta no está dispuesto a pagar. Por tanto, seguimos donde estábamos. La situación con La Liga es distinta. Es de cabreo, provocado por la intención de Javier Tebas, presidente de la Liga de Fútbol Profesional, de vender los derechos de las próximas tres temporadas en paquetes. El objetivo, sacar más dinero. Pero volvamos a la convención que, por primera vez ha estado abierta a todos los empleados de la multinacional y no sólo a los directivos. En total, 125.000 trabajadores. Claro que, no es que estuvieran todos presentes, sino que podían, si querían seguir la jornada en streaming a través de una intranet. Sea como fuere, Alierta aprovechó para anunciar que el bonus se aplicará, a partir de ahora, según la satisfacción del cliente. Cuanta más satisfacción, más bonus. Es lo mismo que comenzó a aplicar Ana Botín en el Banco Santander en 2014. Y la idea no es mala. El problema es cómo medir esa satisfacción. La convención ha servido, además, para presentar 'Elegimos todo', el nuevo plan estratégico de la compañía hasta 2020. Mucho de todo, incluido el cuidado del cliente. El secreto, el internet de las cosas, unido a una favorable evolución financiera de la empresa. Vamos, que según Alierta, el futuro tiene un nombre propio: Telefónica. Más cosas. Por ejemplo, las perlas del presidente de la teleco: - "Vamos a dar al cliente más de lo que cree que necesita". Esta frase es la continuación de uno de los eslóganes internos de la compañía: somos nosotros los que creamos el mercado. O, si lo prefieren: no es que exista la demanda, sino que somos nosotros los que la creamos. - "En los últimos años, la acción de Telefónica ha crecido más del 35% y los dos próximos años serán mejores que los dos últimos". Y las dos últimas -aunque hay muchas más-: - "Hemos invertido 55.000 millones de euros entre 2012 y 2015 y los OTT's invirtieron 80 millones de euros. Ellos no compran espectro y nosotros invertimos 5.000 millones. Tiene bemoles". - "No quiero que Google sepa lo que hay en mi nevera y en mi lavadora". Además de Alierta, el protagonista de la convención ha sido Rafael Nadal (en la imagen), que ha enseñado las claves de la gestión a los directivos de la teleco. ¿Quieren saber cuáles son esas claves? Humildad y esfuerzo. Lo dice el mejor deportista español de todos los tiempos. Pablo Ferrer pablo@hispanidad.com