• Por de pronto, ya acepta desandar lo andado: LOMCE y reforma laboral.
  • Pero para no reconocer su derrota, habla de pactos.
  • Presidirá un Gobierno bocadillo: sin margen en materia económica.
  • Ciudadanos se salva y Podemos ratifica su sesgo guerracivilista.
  • Y por supuesto, católicos: perded toda esperanza. El PP se aleja aún más de los principios no negociables.
  • En lo único que coinciden las cuatro fuerzas políticas mayoritarias en el Parlamento español es en su cristofobia.
No habrá terceras elecciones. Mariano Rajoy (en la imagen) repite como presidente del Gobierno, aunque con un Ejecutivo maniatado. De hecho Rajoy ya ha habla de pactos de Estado para esconder su derrota. Por ejemplo, habrá pacto educativo, una forma de cargarse la LOMCE y habrá pacto para reformar la reforma laboral. Asimismo, Rajoy presidirá un Gobierno sin ningún margen económico: es el gobierno bocadillo, maniatado entre la exigencia de Europa por arriba y a las exigencias del PSOE, que le pide que financie a sus comunidades autónomas y ayuntamientos y de Ciudadanos que ha logrado sobrevivir (en unas terceras elecciones se habría quedado en UPyD) y que quiere aprovechar su última oportunidad. Podemos se radicaliza aún más y adopta el tono guerracivilista que tanto tienta a Juan Carlos Monedero y al leninista Pablo Iglesias. No abandona los salarios parlamentarios pero regresa a la calle. Y el PSOE se divide cada vez más y muestra la mezquindad de la inmensa mayoría de sus dirigentes. En cuanto a los cristianos, perded toda esperanza: El PP se aleja, aún más de los valores no negociables. En lo único que coinciden las cuatro fuerzas políticas mayoritarias en el Parlamento español (PP, PSOE, Podemos y Ciudadanos) es en su cristofobia. Y según el reelegido presidente Rajoy, su intención es cumplir toda la legislatura: ¿A que no? Eulogio López eulogio@hispanidad.com